Educación

4/4/2021

Las batallas en defensa de la educación y contra la presencialidad forzada en Salta

La acción de Tribuna Docente desmiente el discurso de Sáenz.

En el marco de la Asamblea de Autoconvocados, estuvimos este jueves primero de abril frente a la Legislatura, cuando se desarrollaba el discurso inaugural de las sesiones legislativas. Una vez más, el gobernador Gustavo Sáenz mintió acerca de la crisis sanitaria y educativa que vivimos.

Las acciones de Tribuna Docente son la demostración de que Sáenz está en otra sintonía. Nos movilizamos llevando el reclamo del acceso a la vacunación inmediata; la designación de suplentes que cubran los cargos de docentes con dispensa laboral; nombramiento de ordenanzas de planta permanente; refacción de edificios escolares y la copa de leche, dado que a 30 días de iniciadas las clases no se efectivizó el servicio.

Fuimos a exigir la vacunación inmediata de la docencia que hasta ahora no alcanzó ni al 20%. Y también reclamamos la realización de testeos generales. Si las condiciones mínimas no están dadas impulsamos el cierre de escuelas a partir de la decisión de asambleas por establecimiento.

Diez días de movilizaciones

En los últimos diez días, Tribuna Docente junto con el Polo Obrero hemos tomado estas reivindicaciones y protagonizamos distintas movilizaciones. Solicitamos reunión con el director de educación primaria, a la que llevamos las denuncias de más de treinta escuelas, acompañados por el diputado Claudio Del Plá, miembro de la Comisión de Educación, que formó parte de una campaña de visita de escuelas para organizar a la docencia, a través de las denuncias que evidenciaron la falta total de inversión por parte del gobierno, vulnerando sistemáticamente los derechos de las niñas y niños y de toda la comunidad educativa.

La respuesta del director de nivel fue un informe lapidario del ajuste del gobierno en educación. No dio fecha de nombramiento de los suplentes y admite que la política de afectar trabajadores de los planes en negro ha fracasado, justamente porque no les garantizan ninguna protección como una ART, y solo reciben una paga de 10.000 pesos. No nombró ni un solo ordenanza dentro del convenio colectivo de trabajo. Con el sistema de burbujas denominado bimodal, los alumnos trabajan solos el 70 u 80% del tiempo presencial, lo que hace imprescindible la conectividad, no solo en los establecimientos sino también en las barriadas donde residen, además de la distribución de los dispositivos que en Salta no se realizó.

Tampoco hay nombramiento de docentes “recuperadores” que permita una relación pedagógica para trabajar con intervalos de tiempo más reducidos ya que algunos establecimientos los citan cada 15 o 20 días. Queda muy claro para la docencia que en estas condiciones no podemos recuperar la crisis del 2020 ni mucho menos abordar “un combo de dos años en uno”, como pretende el gobierno en su plan jurisdiccional. En relación a las condiciones edilicias y la falta de espacio para las actividades áulicas, el pronóstico fue peor; el director ya mencionado admite que es un problema histórico que desde el 2012 no se crean escuela ni aulas, cuando la matrícula crece sostenidamente.

También organizamos y acompañamos a los estudiantes terciarios que reclamaban no ser excluidos del sistema, exigiendo la prórroga de todos los plazos para la finalización de carrera y de la vigencia de los planes de estudio, por mesas de exámenes extraordinarias. Todo esto, para defender el derecho a educarse en medio de la pandemia. Es el de la Educación Superior que más ha sufrido el año pasado por los efectos del aislamiento, porque a la educación terciaria concurren trabajadores.

De la misma manera estuvimos presentes el miércoles 31 de marzo en la movilización del Frente Piquetero de Lucha con la Juventud del Polo Obrero, la que se movilizó por primera vez en el marco de una jornada nacional, con casi 500 jóvenes, frente a la Dirección de Enseñanza Secundaria. Mediante un importante corte de calle, se obligó a una de las directoras a que reciba el petitorio de los estudiantes por el acceso a conectividad y computadoras.

Todas estas acciones de organización en un amplio pliego de reclamos muestran que el discurso de Sáenz está de espaldas a las verdaderas necesidades de la educación pública. Con este panorama, se pronostica un nuevo año perdido en términos pedagógicos. Ante la llegada de la segunda ola de contagios de covid, se plantea más que nunca el desafío de la iniciativa en cada escuela y en cada barriada para defender el derecho a educarse aún en medio de la pandemia; al mismo tiempo batallamos para que la escuela no sea un foco de contagio.