La comunidad educativa de la Escuela Secundaria 15 de Pontevedra, en Merlo, enfrenta una terrible situación de abandono y desidia estatal: desde antes de la pandemia el edificio anexo a la sede principal, que concentra la mitad de la matrícula de la institución, arrastraba problemas de infraestructura que a pesar de los reclamos a Consejo Escolar no eran solucionados. En los dos años en los cuales la institución permaneció cerrada se ha agravado la situación a tal punto que el edificio tuvo que cerrarse en tanto representa un peligro para estudiantes, docentes y auxiliares.

Entre otros problemas, la construcción tiene su techo totalmente destrozado, al punto que filtra agua en cada tormenta e inunda las aulas y pasillos -la pérdida de libros en la biblioteca fue inmensa debido a las goteras; baños sin condiciones, algunos de ellos sin funcionar; instalaciones eléctricas sin funcionar; aulas vandalizadas -se han robado incluso las rejas que protegían la escuela; puertas y ventanas destrozadas; falta de calefacción en invierno y ventiladores en verano; escaleras sin barandas y ascensor averiado; falta de matafuegos en los pasillos.

Esta situación obligó, en el retorno a clase, a trasladar toda la actividad a la sede principal, lugar donde las aulas no son suficientes, lo que lleva a que los estudiantes cursen de modo alternativo: un día sí, un día no.

La responsabilidad de esta situación es doble. Por un lado, el gobierno de Kicillof fracasó con el plan Escuelas a la Obra, que supuestamente iba a poner a las escuelas de la provincia de Buenos Aires en condiciones. A través del mismo solo se realizaron obras menores en algunas instituciones educativas al tiempo que se precarizaban trabajadores de cooperativas, destinándolos a tareas sin que medie formación alguna. Por otro lado, el gobierno de los hermanos Menéndez, y su Consejo Escolar, también tiene una responsabilidad directa. A pesar de que en el discurso de apertura de sesiones la intendenta interina haya intentando hacer bandera con algunas obras en algunas escuelas, la situación de todo el distrito es alarmante: durante estos años se desmoronó el cielo razzo en la Secundaria 23 y en la Primaria 54; se prendió fuego parte de la Primaria 1 en Merlo Centro; cerró el edificio histórico de la Secundaria 17 y se envió a los estudiantes a cursar a un galpón alquilado donde solo caben dos cursos.

La Dirección del Suteba Merlo, frente a la crisis edilicia de todo el distrito, se ha llamado a silencio para no levantar olas. En contraste, desde Tribuna Docente y la Multicolor, durante este tiempo, hemos llevado adelante el relevamiento de las escuelas del distrito y hemos intervenido ante las distintas situaciones exigiendo el presupuesto necesario para realizar las obras educativas necesarias.

En la EES 15, docentes y padres se han organizado. Se está llevando adelante una campaña de firmas y la difusión del conflicto ha llevado a distintos medios de comunicación a acercarse (como ocurriera en el día de hoy en el noticiero de canal Trece).

Las familias no pueden esperar más. Es imperioso que las autoridades presenten una solución. La comunidad educativa se apresta a luchar como sea necesario por una respuesta urgente.

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