Educación

3/7/2018

Movilización de estudiantes del Conservatorio de Morón

En el día de hoy, los estudiantes del conservatorio de música Alberto Ginastera se movilizaron al Palacio Municipal de esa localidad, llevando el reclamo histórico de un edificio en condiciones y con capacidad para contener a las casi 3 mil personas que transitan actualmente en la actual sede. La situación, como en la gran mayoría de los terciarios, se emparcha con un anexo que se encuentra en una situación precaria, lo cual no evita que año tras año queden cientos de aspirantes sin posibilidad de ingresar, tampoco las aulas superpobladas, la falta de aulas para practicar y de cátedras paralelas en varias materias, sumado a los constantes problemas de infraestructura del lugar. Esta situación fue resumida con la consigna #SeNosCaeElConser bajo la cual fue preparada y organizada la acción.


El objetivo de la movilización consistía en hacer entrar en la “Carta Acuerdo” entre la DGCyE  (Dirección de Educación) provincial y el Municipio de Morón, la construcción de un nuevo edificio en el terreno cedido por el distrito. Estas cartas acuerdo son parte de una reestructuración del sistema educativo en la provincia, que comenzó con el desmantelamiento de la UEP (Unidad Ejecutora Provincial), donde estaba radicado el expediente del reclamo del Conservatorio. Lo que logra el gobierno con estas cartas acuerdo es, por un lado, fijar un cupo anual de instituciones de educación obligatoria a refaccionar, acorde con los presupuestos de ajuste votados por la legislatura y cada municipio el año pasado, y, por otro lado, desviar los reclamos de la comunidad educativa en dos organismos distintos. En los hechos, representa un ‘desahogo’ fiscal para una provincia que recibió este año un fondo compensador y que debería haber declarado hace tiempo la emergencia educativa, por el estado calamitoso de los establecimientos. Como contrapartida, la ‘municipalización’ de la infraestructura escolar, será el terreno para los negociados de las constructoras asociadas a los gobiernos locales, tal como lo hacen los funcionarios de Vidal.



La lucha sigue



La sola organización de la movilización (con una fuerte campaña de difusión), que iba a ser originariamente a Consejo Escolar, le arrancó a este un triunfo parcial. El Consejo, que se había comprometido sucesivas veces desde marzo a mandar un inspector y presupuestar un arreglo urgente de grietas, cumplió recién ayer, no sin presionar al Centro de Estudiantes y a las autoridades para desactivar la movilización. El estudiantado, leyendo la situación, decidió de manera unánime que la movilización pasara por la puerta del Consejo y continuara hasta la municipalidad donde un funcionario tomó nuestro reclamo. 



Esta decisión no fue casual, sino el resultado de un proceso de maduración política en la experiencia con los funcionarios de todos los gobiernos, que con promesas electorales y maniobras habían varias veces desactivado la lucha en el pasado y la habían llevado al ámbito de la negociación. Así fue como por 16 años de gobierno el sabbatellismo logró patear las cosas para adelante, y, a días de terminar su último mandato con la derrota electoral, cedió el terreno del Gorki jactándose en campaña de defender al conservatorio. Esta conclusión es muy importante para que el Centro continúe en la vía de la independencia respecto de los gobiernos ajustadores y profundice la enorme tarea de organización que viene llevando adelante con el cuerpo de delegados y la puesta en pie de comisiones. La lucha consiste ahora en lograr que nos reciba en un plazo breve el intendente, responsable de dejarnos afuera de la Carta Acuerdo, junto a Sánchez Zinny de la DGCyE.