Educación

2/3/2020

Postítulo de Educación Sexual Integral: más de 2000 aspirantes y sin vacantes

En la Ciudad de Buenos Aires

La Educación Sexual Integral se encuentra en boca de todos, ya sea de parte de quienes están a favor de que se enseñe en las escuelas o de sus detractores. Incluso el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta y la ministra Soledad Acuña tuvieron que agregar a la agenda educativa del 2018 "Jornadas ESI" luego de que la enorme movilización de mujeres y disidencias por el aborto legal, seguro y gratuito denunciara la ausencia casi total de educación sexual en las aulas, a pesar de ser un tema supuestamente transversal en la educación de niños y adolescentes.


Bajo el gobierno de CFK, se aprobó una ley de ESI que, a través del artículo 5, permite adaptarse al "ideario institucional", lo que habilita que se baje línea oscurantista y antiderechos en las aulas o que directamente no se enseñe, dado el peso del clero en la educación. Una especie de objeción de conciencia si lo comparamos con lo que sucede con el aborto. 


A pesar de tantas limitaciones, muchos docentes, con sus mejores intenciones, hacen lo que pueden para satisfacer la demanda de sus propios alumnos: la demanda de una Educación Sexual Integral laica, científica y respetuosa de las diversidades. El primer obstáculo con el que se encuentran es la falta de capacitación en el tema. No sólo denunciamos que deberían ser capacitaciones en servicio, sino que la poca que hay es insuficiente (y no es en servicio), como sucede con el postítulo que se da en el ISP "Dr. Joaquín V. González" en CABA, que tiene sólo 200 vacantes para los 2000 interesados preinscriptos, hasta el momento, en lo que va del 2020. 



Las vacantes podrían ampliarse con el proyecto de ley que hemos presentado desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda para eliminar la injerencia oscurantista de las iglesias en sus contenidos. Ademas, éste establece de forma obligatoria la capacitación docente en ESI laica y científica para toda la docencia, sin distinción de si pertenecen a instituciones públicas o privadas, así como incorporar a la formación docente una materia obligatoria en los planes.


La cifra de preinscriptos por sí sola demuestra el desinterés del Estado en el acceso y la formación en ESI, pero no es el único problema. Los docentes de éste y todos los demás postítulos que se otorgan en los terciarios de CABA no gozan de estabilidad laboral ni de los derechos más básicos de cualquier trabajador, como vacaciones y titularizaciones, ya que el gobierno aprueba año a año las resoluciones, de marzo a diciembre. Es decir, que un aspirante de los -por ahora- 1800 que quedan afuera, no tiene la seguridad de que al año siguiente se sigan ofreciendo las propuestas de especialización.


Desde Tribuna Docente denunciamos la falta de vacantes en el postítulo de ESI del Joaquín V. González que, además, debería replicarse en todos los terciarios de la ciudad. Estudiantes y docentes de todos los niveles debemos luchar juntos por más presupuesto para educación y no para el pago de la deuda, por más presupuesto para los terciarios y por la derogación de la UniCABA (iniciativa oficial que pretende degradar la educación terciaria). Denunciamos la injerencia de las iglesias en el Estado y luchamos por una educación sexual integral laica y científica, por el aborto legal, seguro y gratuito y por todas las reivindicaciones de las mujeres y de las disidencias.