La apertura de los listados docentes en la provincia de Buenos Aires para ingreso a la docencia derivó en la solicitud masiva de las constancias necesarias para poder inscribirse por parte de lxs estudiantes de los profesorados. Rápidamente se puso de manifiesto la falta de preceptorxs con los que cuentan los ISFD, recayendo el trabajo en pocas manos y dando lugar a un colapso en la entrega de certificados. La situación es apremiante, ya que la fecha límite para anotarse en los listados es el 5 de marzo.

En los profesorados, la falta de nombramientos -a raíz de los sucesivos ajustes en la educación- es histórica y conduce a una sobrecarga laboral enorme, la cual se agravó durante la virtualidad. Por ejemplo, en el ISFD 29 de Merlo cursan durante la presencialidad hasta noventa estudiantes hacinados por salón. Si lxs preceptorxs sólo tuvieran dos cursos a cargo -pero en algunos casos tienen muchos más-, estamos hablando de más de 180 estudiantes bajo su responsabilidad.

Pero la situación se complica aún más debido a la falta de personal en todo el nivel, y en muchas ocasiones los equipos Directivos, en lugar de exigir nombramientos al Estado, sacan a los preceptores de sus tareas frente al alumnado para que realicen trabajo de Secretaría.

En el escenario actual, atravesado por una escalada inflacionaria, despidos masivos y un aumento de la pobreza, el impedimento para acceder a la docencia debido a un atraso en la entrega de constancias coloca a una gran cantidad de estudiantes en una situación límite.

Nuevamente se ve perjudicado el mismo sector que padeció la ausencia de actos públicos durante todo el 2020, quedando por fuera del trabajo docente.

Organicémonos en cada profesorado para exigir un mayor nombramiento de preceptorxs y personal administrativo que permita resolver esta situación. A su vez, reclamamos la extensión de los períodos de inscripción a los listados para que nadie se quede afuera.

¡Abajo el ajuste en educación de Alberto Fernández y lxs gobernadorxs! ¡Aumento del presupuesto ya!