La semana pasada, un grupo de personas ingresó al jardín de infantes N°957 René Favaloro, del distrito de Quilmes, y efectuó un robo, que fue acompañado por el destrozo del establecimiento educativo. Se trató del tercer robo sufrido por la comunidad educativa del 957. Este tipo de delitos se convirtieron en un padecimiento sistemático para los trabajadores del distrito y para la comunidad educativa en particular.

Los padres de los alumnos informaron a los medios que “los chicos no van a poder empezar las clases después de las vacaciones” (Diario San Francisco, 25/7). El episodio tuvo lugar el domingo 31 y fue precedido por un robo ocurrido el anterior viernes 29, cuando hubo otro ingreso delictivo al secundario y al primario de este mismo establecimiento y fueron robados muebles y distintos materiales.

La comunidad educativa denunció en numerosas oportunidades la situación y sin embargo nada cambió. Esto sucede porque es la misma policía la que está involucrada en el delito, garantizando las zonas liberadas y/o en directa connivencia con el crimen organizandolo.

En el distrito de Lomas de Zamora, a fines del mes de junio, ocurrió un suceso parecido en el Instituto 103, donde un grupo no identificado de personas ingresó armado al establecimiento. La comunidad educativa de ese instituto se movilizó al día siguiente y fue duramente reprimida por la Bonaerense de Berni y Kicillof, metida hasta los tuétanos en el delito organizado.

Hacemos responsable al gobierno municipal de Mayra Mendoza de la integridad de la comunidad educativa de Solano y del conjunto del distrito.

Desde la Unión de Juventudes por el Socialismo (UJS) y la Juventud del Polo Obrero (JPO) le exigimos a las autoridades municipales que coloquen un colectivo gratuito a disposición de los establecimientos educativos, que pase por su puerta y lleva al estudiantado a las estaciones más cercanas y pobladas. Exigimos la instalación de luminaria en las zonas aledañas a los establecimientos educativos y el aumento del presupuesto educativo. Y llamamos a la comunidad educativa a dar una pelea contra las zonas liberadas y para defender el derecho a estudiar de la juventud.