Estudiantiles

21/11/1996|520

El Frente de Lucha volvió a ganar en el Buenos Aires

Por tercer año consecutivo, el frente de Lucha Estudiantil (FLE) se impulsó en las elecciones del Colegio Nacional de Bue­nos Aires. El FLE, integrado por Unión De Juventudes Por El Socialismo y compañeros independientes, tam­bién obtuvo la mayoría de los representantes estudiantiles del Consejo Asesor.


El FLE obtuvo 621 votos con­tra 547 de la Franja Morada, la agrupación de la UCR, y 397 del Movimiento Independiente (M-I.), un agrupamiento origi­nalmente vinculado a los ‘socialistas’ del Frepaso. El M.I. hace macartismo contra las agrupa­ciones de izquierda por estar “manejadas por gente de fuera del Colegio”. Como las elecciones para el Consejo son obligatorias, el triunfo del FLE ha sido masivo.


Frente de Lucha, otra vez


Con el FLE en la dirección del Centro cambió la historia del movimiento estudiantil del Co­legio, dominado hasta entonces por Franja Morada y corrientes manipuladas por el aparato di­rectivo del Buenos Aires, desig­nado por la UCR. El Buenos Ai­res se sumó, entonces, a las mo­vilizaciones contra las leyes educativas, y revitalizó el fun­cionamiento del Cuerpo de Dele­gados.


El CENBA se empeñó en or­ganizar la lucha contra la elimi­nación del actual 6″ año, el cual garantiza el ingreso irrestricto a la Universidad.


En los últimos meses, el FLE organizó un enorme movimiento por la derogación del re­glamento de sanciones y disci­plina, y con centenares de estu­diantes reunidos en asambleas, elaboró un “régimen de con­vivencia” basado en la defensa de las libertades democráticas y en la unidad del movimiento estudiantil y docente, en su lu­cha en defensa de la educación pública.


Contra viento y marea


La victoria del FLE, en esta oportunidad, hay que medirla en relación al operativo político de maniobras y trampas de todo tipo que se intentaron para que­brarlo. Las autoridades prohi­bieron este año el permiso que tenía el Centro para recorrer los cursos y trataron de confundir a la masa del colegio con una cam­paña insidiosa, adjudicando al CENBA ‘inventar’ la elimina­ción del 6° año, y distorsionar el significado de la ‘reforma’ en la UBA (acortamiento de carreras, postgrados arancelados) y, por otro lado, presentando a Franja Morada como opuesta a la apli­cación de la ley de educación menemista.


Se trató de destruir al FLE, mediante una ofensiva lanzada ni más ni menos que por el pre­sidente saliente del CENBA, del propio Frente, que trató de ex­pulsar a la UJS para transfor­marlo en una agencia del antes señalado “movimiento inde­pendiente”. Los independien­tes del FLE defendieron el fren­te común con la UJS y, en con­junto, plantearon una campaña contra la “reforma educativa menemista y radical”, y de­nunciaron los intentos de rom­per al FLE. Fue la campaña elec­toral más reñida y más politiza­da de los últimos años.


Contra viento y marea, ganó por tercera vez consecutiva. “Llora, Franja, llora/ en la Iglesia que está abierta/ que el CENBA sigue en manos de la izquierda”.