Victoria en el Moreno

El viernes 3 el Centro de Estudiantes del Mariano Moreno salió a la calle a luchar contra el autoritarismo y las políticas municipales.


Sucedió a tres días de la asunción como interventor del ex-vicerrector. Pasando por arriba de su promesa de concursar el cargo, en esas 72 horas lanzó un ataque salvaje contra el estudiantado, para imponer un Reglamento basado en apercibimientos, suspensiones y expulsiones. El intento de activar la aplicación de ese reglamento se vincula directamente con el propósito de regimentar a un colegio que se moviliza en forma constante por sus derechos y reivindicaciones.


Cuando el Centro pasó por las divisiones comunicando a los chicos la novedad, Mora, el interventor, prohibió al C.E.M.M. continuar haciéndolo. Atacó así abiertamente la libre organización de los alumnos.


No es casual esta serie de decisiones por parte de la autoridad. Mora es un enviado directo de De la Rúa y por lo tanto tiene que llevar adelante la política de cierre de cursos, la ley federal y aplicar un presupuesto miserable para la educación. El centro de estudiantes dirigido por la UJS lleva una política de defensa de la escuela pública, laica y gratuita y de defensa inclaudicable del estudiantado, por lo tanto es la traba que hay que erradicar para privatizar la educación.


Por esto el día 3, desde muy temprano, el colegio entró en ebullición. Se realizaron 2 asambleas con la totalidad del colegio y allí se votaron las consignas de la lucha: “derogación del reglamento regimentador” y “libre organización al centro de estudiantes y a la Cooperadora”, que por llevar adelante una posición por la educación pública, también ha sufrido los embates y prohibiciones del ‘democrático’ aliancista.


La lucha fue un éxito rotundo de los estudiantes, se realizó una sentada sobre Rivadavia que atrajo a los medios de comunicación y obligó al interventor a recular derogando el reglamento y dando total libertad al C.E.M.M.


Esto no hace más que confirmar que la lucha es el camino para la victoria. Ahora más que nunca hay que organizarse en una juventud con una política combativa y consecuente. Esa organización es la Unión de Juventudes por el Socialismo.