Adeom: un nuevo ataque al movimiento obrero uruguayo

La intendenta ‘comunista’ anunció que aplicará sanciones a los trabajadores municipales que no acataron el cumplimiento de los ‘servicios esenciales, desde 5 a 20 días, sin goce de sueldo. El gobierno frenteamplista pretende no sólo derrotar al gremio municipal en sus reivindicaciones salariales, sino que pretende liquidar cualquier atisbo de independencia de clase y, por lo tanto, destruir a su dirección clasista.

Mientras que el PCU “critica” la desigual distribución de la riqueza en estos seis años de gobierno del FA, en la intendencia de Montevideo -que es donde gobierna- se muestra su verdadera política: decretando la esencialidad, militarizando y además sancionando a los trabajadores que luchan, lo cual pinta de cuerpo entero a un partido que se hace llamar “comunista”.

La lista de la intendenta

No es casualidad que las sanciones se apliquen en este momento. Las mismas pretenden darle un golpe a los sectores clasistas de Adeom a un mes y medio de las elecciones. Los trabajadores más afectados por estas medidas son los sectores de limpieza que se caracterizan por su combatividad y donde siempre ha triunfado el clasismo y donde la 1980 tiene un peso importante.

Este ataque desde la Intendencia tiene un vínculo directo con la burocracia sindical de Adeom. Y, de hecho, puede afirmarse que es una política impulsada por el propio PCU como una clara maniobra para desgastar al gremio.

Todas las listas que responden al gobierno se unieron en una nueva lista, la “2011”, que pretende arrancarle la dirección a las listas combativas. Esta lista contó en su lanzamiento con la presencia de conocidos políticos del FA, con lo cual cuentan con el apoyo directo del gobierno; es decir, con los que decretaron la esencialidad, negándoles un aumento de salario a los trabajadores, e impusieron las sanciones. Desde el vamos, esta lista muestra su completa subordinación al gobierno y nace para quebrar la independencia política de Adeom.

Su política reniega de toda la lucha que dio Adeom en el último período y, sobre todo, no denuncian la campaña represiva desatada por su “camarada” Ana Olivera.

Su slogan de campaña plantea “un cambio hacia fuera en la relación con los vecinos y la sociedad y con el PIT-CNT”. En este planteo se escamotea un rechazo directo a las medidas de lucha adoptadas por Adeom y un apoyo a la dirección del PIT-CNT, que no se pronunció en contra de la esencialidad y, por el contrario, atacó al propio gremio municipal en medio del conflicto, colocándose de esta forma con los Olivera y compañía.

El gobierno y la burocracia van por todo

El gobierno del FA pretende quebrar a la vanguardia del movimiento obrero uruguayo liquidando a su expresión más consciente, que es la dirección del gremio municipal. En la actual situación política nacional, el gobierno necesita cumplir este objetivo, porque ya a esta altura tiene pies de barro. Los bajos salarios y las malas condiciones laborales han llevado a la lucha a varios sectores del movimiento obrero, por ejemplo los supermercados y los call center. La burocracia de Articulación comienza a ser cada vez más cuestionada. Por otro lado y como punto fundamental, la burocracia y el gobierno por este lado también se asegurarían que Adeom no juegue ningún rol en el congreso de agosto del PIT-CNT, como lo ha hecho en otros años, impulsando un reagrupamiento clasista al interior del congreso. En el último congreso de la central sindical de 2008, la política clasista impulsada por Adeom y otros sindicatos obtuvo un tercio de los votos (incluso en un escenario fuertemente regimentado por la burocracia).

La asamblea del martes 15, con 800 trabajadores municipales, resolvió “realizar un paro con movilización al despacho de la intendenta si se aplican las sanciones y realizar una nueva asamblea dentro de treinta días”. En la misma se presentaron dos mociones: por un lado, las listas 1980 y 17, que planteaban volver a iniciar una batería de movilizaciones, paros y la ocupación de los lugares de trabajo, ya que el haber levantado las medidas en diciembre pasado no llevó a una negociación sino que condujo a una profundización del ataque, y por otro, la nueva lista 2011, junto con la 307, propusieron rebajar nuevamente las medidas a un paro y una movilización, y cumplir con la exigencia de la autoregulación que plantea la IMM. La 307 está viabilizando, en la práctica, la política que las listas oficialistas no pueden por si solas. Ya lo había expresado en la asamblea de diciembre y lo volvió a demostrar nuevamente en esta ocasión. Justo cuando frente a los ataques del gobierno, diversos sindicatos se pronunciaron en solidaridad con la lucha municipal, contra las medidas represivas de Olivera, visualizando esta política como un ataque al conjunto del movimiento obrero, como la Federación de municipales, el Suinau (sindicato del instituto del menor), Postales (sindicato del correo).

Adeom vuelve a ocupar un lugar en el escenario político nacional en la lucha por aumento de salario y contra las medidas represivas del gobierno, es necesario, desde ya, una fuerte campaña de solidaridad y de apoyo a su gran lucha.