Brasil: un mes de histórica huelga general del Correo

Las centrales obreras deben movilizar por el triunfo de los trabajadores postales

Sobre la base de informes enviados por Luta pelo Socialismo y Roberto Rutigliano de Rio de Janeiro

Foto: @luizrochabh / LPS

Dentro de 48 horas se cumplirá un mes de huelga general de los trabajadores del Correo. Una respuesta contundente a la provocación del gobierno Bolsonaro-Guedes que ha desconocido el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) de los trabajadores postales. Paso esencial, no solo para reducir gastos salariales, despedir trabajadores y aumentar la explotación laboral, sino para ‘mejorar’ las condiciones que permitan concretar la privatización lisa y llana de la Empresa de Correos Estatal (ECE).

El viernes 11 se reunió el Tribunal Supremo del Trabajo para tratar de encontrar, teóricamente, una salida al conflicto. Pero… prácticamente no modificó en nada el ataque contra el CCT de los postales. Y convocó a una nueva audiencia para 10 días después.

¿Otra vez? El “hay 2022” es un camino de derrota

El Correo es una de las empresas estratégicas que Bolsonaro-Guedes quieren privatizar. Pero, no porque su operatoria implique un déficit fiscal. Por el contrario, en todos los últimos ejercicios fiscales la ECE figura con superávit financiero. Es parte de un plan generalizado de privatizaciones-entregas del patrimonio público en favor de las multinacionales y los grandes sectores de la burguesía nacional a ellas asociados. Hace un año atrás, en un discurso en la Cámara de Diputados de Brasil, Bolsonaro anunció su plan de privatizar el Correo. Para ello colocó al frente de la empresa a un General. Es público que detrás del Correo se profundizará el curso contra la Caixa (bancaria), Petrobras, etc. Una política que pretende disminuir costos, bajando salarios y eliminando conquistas obreras, introduciendo la flexibilidad y precariedad laboral y marchando a la entrega de las empresas estatales.

Los trabajadores del Correo con su huelga se han colocado a la cabeza de la resistencia obrera y antiimperialista nacional. Pero, teniendo todo el mundo en claro esta orientación antiobrera y entreguista de Bolsonaro-Guedes ¿por qué las centrales obreras (CUT, etc.) no convocan a un plan de lucha nacional de todo el movimiento obrero? ¿Por qué dejan aislada la huelga general de los postales?

La dirección del PT y sus subsidiarias (Psol, etc.) han vuelto a reflotar la doctrina come-sapos de que hay que esperar y acumular fuerzas para derrotar a Bolsonaro en las elecciones presidenciales del 2022. Repiten la ‘estrategia’ de desgaste que permitió el golpe contra Dilma Rousseff, las sanciones de la reformas laboral y previsional antiobreras, la encarcelación de Lula, etc. que fue desmovilizando y desmoralizando al pueblo trabajador y explotado y dándole aire a la ofensiva derechista que llevó a Bolsonaro al poder.

La historia se repite –dijo Marx- una vez como tragedia y otra como farsa. El silencio de la CUT y demás centrales obreras subordinadas a esta estrategia de desgaste de la lucha de masas y espera electoralista, amenaza con modificar en cierto sentido la frase de Marx y que esta segunda vez vuelva a ser una tragedia mucho más dramática que la primera. Mientras Lula, busca el apoyo y las alianzas con las bancadas y partidos del “Centrao”, las burocracias sindicales dejan aisladas la poderosa huelga general de los trabajadores del Correo y otras que se están desarrollando. Uno de los problemas políticos centrales en la situación política nacional es cómo llevar al triunfo la huelga general de los trabajadores postales. Un triunfo de la lucha obrera introducirá a la clase obrera –ya no en forma potencial- al ruedo de la lucha política nacional como un factor autónomo y decisivo.

La huelga continúa

El viernes 11, los trabajadores postales llevaron a cabo una jornada nacional de lucha en apoyo a su huelga. En Minas Gerais, la actividad –convocada por el combativo Sintect- se desarrolló en Belo Horizonte. Contó con la participación de trabajadores de todas las regiones del Estado, dirigentes sindicales y representantes de otros gremios. “Los ecetistas dieron una fuerte demostración de fuerza, que están firmes en la lucha y que no van a aceptar tranquilamente los excesos del general que quiere privatizar y destruir la ECT”, señaló el Sintect.

Se hizo una concentración central en la Plaza de la Estación. Luego, miles de trabajadores marcharon hasta el edificio del Correo Central, donde realizaron su asamblea, que ratificó por unanimidad continuar indefinidamente el paro nacional hasta la recuperación de su CCT.

Hubo movilizaciones en todo Brasil: en Brasilia, Salvador (Bahia), San Pablo y otros estados.

La huelga continúa. Es vital romper su aislamiento. Es necesario impulsar coordinaciones y solidaridad activa con esta histórica lucha. No solo de trabajadores, sino también de estudiantes, artistas, intelectuales, de las favelas, en apoyo, por el triunfo de la huelga de Correos. Pronunciamientos de asambleas y plenarios de fábricas y sindicatos para que la CUT rompa su parálisis y vaya a un paro general, para cumplir con su papel de central de los trabajadores y no de subordinación a las tácticas electorales del lulismo. Impulsar la realización de congresos de bases por municipio, Estado y a nivel nacional para coordinar un real plan de lucha.