Las fuerzas de seguridad israelíes lanzaron este lunes 3, en el campamento de refugiados de Jenín (Cisjordania), un operativo que fue definido por el vocero militar Richard Hecht como el más importante desde el fin de la segunda intifada, en 2005. Once palestinos murieron y ochenta resultaron heridos.

Drones y topadoras despejaron el camino de las tropas terrestres sionistas, que tomaron casas, edificios y apostaron francotiradores en los techos. Según el sitio Middle East Eye y la agencia palestina Wafa, hospitales de la zona fueron atacados con gases lacrimógenos. También se cortó la luz en el barrio.

El campamento de refugiados de Jenín, ubicado dentro de la localidad homónima, nació en 1953 como un asentamiento donde se reubicaron algunos de los 700 mil desplazados durante la formación del Estado de Israel, en 1948. En la actualidad, viven allí 14 mil personas bajo un férreo control del sionismo: cámaras de seguridad, barreras de acero y puestos de vigilancia. Se trata de una zona fuertemente empobrecida.

En los recurrentes ataques contra el campamento, los militares matan tanto a combatientes de las organizaciones armadas como a civiles. En uno de los últimos operativos, en mayo de 2022, fue asesinada la corresponsal de la cadena Al Jazeera, Shireen Abu Akleh. En lo que va del año, en toda Cisjordania ya son más de 130 los muertos a manos de las fuerzas israelíes.

Condeno fervientemente la criminal ofensiva militar del Estado de Israel contra Cisjordania. La mayor de los últimos 20 años. 🧵 pic.twitter.com/FQ5vApHfAB

— Gabriel Solano (@Solanopo) July 4, 2023

Durante el segundo día de operaciones de Israel en Jenín, estalló una huelga general en Cisjordania que paralizó comercios y el transporte. También hubo movilizaciones en otros campos de refugiados.

El ataque en Jenín viene precedido de una ola de agresiones fascistas de colonos contra localidades palestinas. Estos grupos, representados en el actual gobierno israelí, ingresan y queman los cultivos, autos y atacan a la población, bajo la complicidad policial. “Miembros del Ejército y la policía israelíes se quedaron quietos mientras un gran grupo de colonos quemaba una gasolinera, huertos, una fábrica de cemento y decenas de coches”, denunció Yaqoub Oweis, presidente del Consejo del pueblo de Al-Lubban Al-Sharqeya (cable de la agencia Reuters, reproducido por La Nación.com, 21/6).

La coalición de gobierno de derecha que lidera Benjamin Netanyahu plantea en su programa la legalización y expansión de los asentamientos coloniales israelíes y retoma el planteo de anexión de Cisjordania, que había quedado en suspenso tras el naufragio del llamado Acuerdo del Siglo, en 2020. Es un gobierno que está profundizando los ataques en todos los terrenos contra la población palestina.

Abajo los crímenes contra el pueblo palestino y el Estado sionista. Por una Palestina única, laica y socialista. Por una federación socialista de pueblos de Medio Oriente.

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