China: una megadevaluación

Las cotizaciones del renminbi (yuan)


Desde que la divisa de China comenzó a negociarse en el mercado internacional, enseguida se diferenció de la cotización que registraba en el mercado doméstico, donde influye la intervención del Banco Popular de China. En el gráfico se observa que la devaluación en la cotización internacional es muy superior (6%) a la doméstica (3%). Lo que revela que la especulación internacional podría producir una devaluación aún mayor del renminbi o yuan con efectos comerciales devastadores.


La tendencia devaluatoria contrasta con las caracterizaciones de numerosos analistas, para los cuales no existiría la intención de comenzar una guerra comercial por parte de China. Las autoridades chinas, por su lado, aseguraron que la devaluación operada – del 2% – sería “por única vez”. Esta afirmación contradice la posibilidad de que el yuan sea reconocido como divisa internacional, uno de los propósitos de la devaluación, con la que se busca una cotización 'más realista'.


La caída del 8,3% de las exportaciones respecto del año anterior es una referencia de que el porcentaje de la evaluación sería insuficiente. Ocurre que una tasa mayor habría desatado el pánico en las bolsas de China, donde los yuanes se habrían precipitado a convertirse en divisa extranjera. Precisamente este temor, sin embargo, es lo que explica el pánico que se ha apoderado de las bolsas domésticas.


La devaluación de China trastorna la intención del Banco Central de Estados Unidos de aumentar la tasa de interés interna, cuya finalidad es poner un freno a la enorme especulación internacional que ha desatado la tasa subsidiada. Estados Unidos no se puede permitir una mayor desvalorización del dólar cuando el yuan comienza una tendencia devaluatoria. Este cuadro renovaría la tendencia al refugio en el oro, en especial cuando unas once naciones se encuentran a punto de declarar una cesación de pagos (defol) de su deuda pública, de la privada y de los bancos.