El movimiento obrero internacional debate el impacto de la pandemia

Importante Facebook Live con secretarios generales y referentes sindicales de Argentina, Brasil, Perú y Francia

Este sábado se llevó a cabo el Facebok Live sobre “el movimiento obrero internacional frente a la pandemia y la crisis”, con la participación de Alejandro Crespo, secretario general del Sutna y dirigente de la Coordinadora Sindical Clasista-PO; Jorge Juárez, secretario general de la Federación Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgicos del Perú (Fntmmsp); Robson Silva, director jurídico de la Federación Nacional de Trabajadores de Correos (Fentect) de Brasil y presidente del sindicato de Trabajadores de Correos de Minas Gerais (Sintect-MG), además de dirigente de Luta Pelo Socialismo (LPS); y Maria Pereira, militante de la CGT Correos de París 11 y dirigente de la organización L’Etincelle de Francia (La Chispa). El evento fue coordinado por Ileana Celotto, secretaria general de la Asociación Gremial Docente de la Universidad de Buenos Aires (AGD-UBA) y dirigente de la CSC-PO.


La lucha en la Argentina


En su intervención, Crespo se refirió a la emblemática lucha que ha dado el Sutna en defensa del salario y de las condiciones de seguridad e higiene, en el cuadro de pandemia. En relación a la cuestión salarial, mencionó que la rápida respuesta del sindicato logró que las empresas Pirelli y Bridgestone acordaran el pago al 100% de los haberes. En el caso de Fate, una serie de medidas de lucha derrotaron el propósito de la patronal de rebajar los sueldos, logrando también el pago al 100%, en un contexto marcado por las reducciones salariales que posibilita el acuerdo de la UIA, la CGT y el gobierno. La defensa del salario aparece estrictamente relacionada con el problema sanitario. Al asegurarse la totalidad del sueldo, los trabajadores no se encuentran presionados a concurrir a su puesto de trabajo a cualquier costo.


Crespo también se refirió a la pelea por las condiciones de seguridad e higiene, en una actividad cuya producción ha sido declarada esencial por parte del gobierno. Al respecto, mencionó el caso del protocolo en Fate, donde hay mediciones de temperatura antes de entrar a la planta, barbijos para el ingreso y provisión de alcohol en gel. También se logró la duplicación de micros para un mejor desplazamiento de los trabajadores en las tres fábricas y otras varias medidas de seguridad.


Crespo valoró la importancia de la recuperación de los sindicatos, al hablar de la recuperación del Sutna de manos de la burocracia, en 2016. “La primera paritaria se cerraba en una asamblea general con más de 1.800 trabajadores decidiendo, lo que marcaba la unidad del gremio creciendo”, apuntó. Denunció el intento de las patronales de avanzar en una reforma laboral gremio por gremio y resaltó la independencia del sindicato de todos los gobiernos de turno. “La defensa de los intereses de los trabajadores, más allá del gobierno que esté, se denomine neoliberal o popular”, resumió.



La precarización laboral en Perú


Jorge Juárez brindó un panorama de la situación de los mineros peruanos. Hay aproximadamente 200 mil trabajadores, un 70% de los cuales se encuentra tercerizado. Juárez denunció que el gobierno de Martín Vizcarra permitió a las mineras seguir operando, pese a que no se trata de una actividad esencial. Y denunció que, en materia de seguridad e higiene, “no se está dando las garantías a los trabajadores mineros”. Hasta el momento, hay 821 mineros infectados. Las mineras financian las campañas electorales de los grandes partidos.


Asimismo, marcó que el gobierno fue cediendo a los distintos reclamos de las patronales, nucleadas en la Confiep, por ejemplo, a través de la aplicación de la “suspensión perfecta”, que habilita las suspensiones sin goce de sueldo.


Juárez cuestionó a los gremios que se han acostumbrado al financiamiento externo de sectores que promueven capacitaciones sobre normativas que avanzan en una precarización de los trabajadores. Y refirió la dura batalla que llevan a cabo: la Federación tiene 40 mil afiliados, haciéndose difícil la sindicalización del enorme sector precarizado.


Francia ante la pandemia


Maria Pereira brindó un exhaustivo panorama del movimiento obrero francés, señalando que más de 550 mil personas han perdido sus puestos de trabajo en los últimos dos meses. El sector más precarizado de la clase trabajadora es también el más golpeado por las cesantías. Denunció que “una ola de despidos está siendo preparada por los principales grupos capitalistas de Francia”.


Los trabajadores están luchando en defensa de las condiciones de seguridad e higiene. En varios supermercados se ha logrado imponer medidas de distanciamiento social y límites en el número de clientes. En Amazon, una huelga obligó a la empresa a reducir su actividad. También mencionó la experiencia de su propia sucursal de correo, donde 50 trabajadores ejercieron su derecho de retirada (en Francia, técnicamente, al trabajador le asiste este derecho cuando la patronal no garantiza la seguridad en el  trabajo) y lograron barbijos y otras medidas de protección.


Maria destacó también la lucha contra la reforma previsional, que “mantuvo al gobierno (de Emmanuel Macron) en jaque durante casi 3 meses” y lo obligó a aplazar la medida. “El descontento (obrero) sigue, pero confinado” por la pandemia, remató.


Consultada sobre los chalecos amarillos, refirió que el movimiento tiene un carácter mayormente proletario y descartó que estuviera copado por la derecha. Cuestionó a la CGT y al resto de las centrales sindicales, que pretextando dicha influencia, sostuvieron una política hostil hacia el movimiento. En el caso de la CGT, por ejemplo, se dedicó a convocar medidas separadas de lucha.


La lucha contra Bolsonaro


Robson Silva denunció la política de militarización del gobierno de Jair Bolsonaro y la agenda de ataque contra las masas, en el curso de la pandemia, con millones de trabajadores con reducción de salarios y un congelamiento de los sueldos en el sector público hasta el 2021. Mientras tanto, el gobierno sale al rescate de la banca.


También cuestionó la política de privatizaciones, que tiene en la mira empresas estratégicas como el correo y Petrobras, y el vaciamiento de la salud pública, para favorecer la medicina privada, cuyas consecuencias calamitosas se ven ahora con la pandemia.


Silva planteó la consigna “Fuera Bolsonaro y su gobierno: por un gobierno de los trabajadores de la ciudad y del campo”. Llamó a la CUT a desarrollar la huelga general y planteó un frente único de la izquierda. Cuestionó también la política de las centrales sindicales, que invitaron al acto del 1° de mayo al antiobrero expresidente Fernando Henrique Cardoso. Y la política de “frente amplio” hacia sectores de la derecha.


A lo largo del Facebook Live se leyeron numerosos saludos de sectores representativos del movimiento obrero de los distintos países. Se trató de una importante actividad en la lucha por la independencia política del movimiento obrero a nivel internacional.


Ileana Celotto planteó en unas palabras finales que “esta iniciativa ha sido un aporte a la pelea por la independencia de los sindicatos, en el marco de la lucha de la independencia política de la clase obrera”


“Las distintas exposiciones que hemos escuchado nos demuestran que tanto con gobiernos que se llaman ‘nac and pop’ como los Fernández, o derechistas como en Perú y Francia o el bolsonarismo en Brasil, la tarea frente a la debacle capitalista es la pelea en las organizaciones obreras por una nueva dirección clasista en los sindicatos, y la estructuración de la vanguardia en función de forjar una salida obrera para que la crisis la paguen los capitalistas. A nivel continental, la iniciativa de la Conferencia Latinoamericana de la Izquierda, que se llevará adelante ni bien la pandemia lo permita, no solo tiene una enorme vigencia, si no que es una necesidad de la clase obrera y la izquierda para enfrentar al imperialismo y a las variantes de la burguesía latinoamericana agrupadas en los Grupos de Lima y Puebla”, planteó Celotto.