Diez mil trabajadores municipales de Florianópolis decidieron por unanimidad en Asamblea General mantener la huelga que ya lleva más de veinte días. En represalia, el procurador general de Florianópolis, Diogo Pitsica, acaba de pedir la prisión del presidente del Sindicato, Alex Santos, y de toda de la directiva, por el crimen de “desobediencia”, su destitución y la intervención del sindicato para restablecer el “orden constitucional”.

La huelga comenzó el 17 de enero. Reclama la derogación del paquetazo de ajuste enviado a la Cámara por el alcalde Gean Loureiro (PMDB). Elimina derechos ganados en luchas de décadas por los trabajadores (empleo, salarios, conquistas). Los trabajadores reclaman la revocatoria de este paquetazo, que fue aprobado el 24 de enero en una votación fraudulenta, mientras la Policía Militar reprimía a los trabajadores que manifestaban en contra. En repudio, miles de personas marcharon por la avenida Mauro Ramos a Beira-Mar Norte, en defensa del Servicio Público, de los trabajadores y para que se vaya la derecha ajustadora en el Gobierno. Este paquetazo afectará directamente al cierre de escuelas, clínicas de salud y centros de día. Se pone en marcha la privatización de los servicios públicos en Florianópolis.

Por ejemplo, veinte secretarias escolares, con más de 26 años de trabajo, responsables del registro y organización de todas las tareas administrativas, fueron echadas. El Alcalde ahora promete recontratarlas pero ‘tercerizadas’ por una privada.

La huelga esta siendo impulsada por el sindicato (SINTRASEM) y un Comando de Huelga votado por los trabajadores. A 22 días de iniciada la huelga gana cada vez más apoyo en la Ciudad.

El gobierno dice que corta salarios y conquistas porque no alcanza la plata, pero al mismo tiempo libera del pago de deudas millonarias a grandes empresarios de la Ciudad. El quite de horas extras, bonificaciones, etc. reducen los ingresos para los salarios más bajos en un 50% (de 2000 a 1000 reales).

El ataque de este alcalde es parte del ajuste fiscal votado por Temer en el Congreso Nacional (PEC 55). La justicia cómplice ha decretado la ‘ilegalidad’ de la huelga, pero hasta ahora sólo logró concitar un apoyo más amplio en la movilización, como lo prueba el hecho de que se acaba de realizar la manifestación más grande de la historia de los trabajadores de Florianópolis.

Por un Congreso Nacional de Trabajadores para organizar un plan de lucha por la derogación de estos paquetazos. Pongamos en marcha en Florianópolis esta perspectiva convocando a un Congreso de Trabajadores de la Ciudad y del Departamento de Santa Catalina.

Abajo el paquetazo. En defensa del servicio publico y de los derechos del trabajador. No a la tercerización. Huelga General.

 

Sobre la base de un informe enviado por Alfeu Goulart (Tribuna Clasista de Santa Catarina)