Francia: huelga de petroleros en Grandpuits

Los trabajadores franceses de la refinería Grandpuits han convocado, desde este lunes 4, una huelga indefinida en defensa de 700 puestos laborales. En asambleas con participación del 90%, se votó a favor de exigir la reincorporación inmediata de los contratados y subcontratados, no al cierre de la refinería, mejores condiciones laborales de seguridad y que se garanticen las licencias pagas por Covid-19.

A mediados de septiembre, la multinacional petrolera Total anunció un recorte en esa refinería, so pretexto de “una reconversión verde” en sus actividades para disminuir las emisiones de carbono hasta 2050. Sin embargo, todo indica que el motivo real sería evadir la reparación del oleoducto Ile-de-France, un costo de 300 millones de euros. En 2014 y 2019, fueron los mismo trabajadores quienes denunciaron la confidencialidad de la empresa frente a las fugas petroleras.

Además, la nueva conciencia “eco friendly” es una farsa. En 2020, la empresa firmó un enorme proyecto petrolero en Uganda, que supone la perforación de 400 pozos extractivistas… ¡en el Parque Nacional de Murchison Falls! Eso, sumado a la construcción de 1.500 km de ruta, hostigó a 100.000 familias agrícolas a que desalojen sus tierras, con la monopolización del agua potable zonal, la aniquilación de fauna y la degradación ambiental, ya no solo de Uganda, sino también de su frontera con Tanzania.

Pero este ataque en Grandpuits no es aislado. La empresa Michelín anunciaría, en las próximas horas, un recorte laboral de 2.300 puestos. El ataque de estas empresas capitalistas, que duplicaron sus ganancias durante la pandemia y hasta recibieron millones de euros por parte del Estado, es inaudito. Para la victoria de estas luchas, asambleas en todos los lugares de trabajo y asambleas generales que deliberen un plan de lucha. Basta de despidos. Por condiciones laborales íntegras.