El 22 de abril, un día después del 32º aniversario del golpe militar de 1967 que estableció la dictadura de los coroneles en Grecia, las fuerzas represivas del Estado capitalista griego atacaron una pacífica manifestación de 5.000 personas en Atenas contra la agresión imperialista de la Otan en los Balcanes.

Hubo 135 detenciones; entre los detenidos había 18 miembros y simpatizantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores (EEK), incluyendo al secretario de su Juventud, Kyriakos Moutidis, y a dos miembros de su Comité Central, Grigoris Dafnis y Giorgios Mitrovgenis. Fueron incomunicados y transferidos al Cuartel Central de la Seguridad.

Una delegación de dirigentes de partidos de izquierda, incluyendo al secretario general del EEK, Savas Michael, y de los sindicatos intentó visitar a los detenidos. Les fue prohibido por las autoridades y sufrieron un violento ataque de sus fuerzas policiales especiales. Al día siguiente, por la mañana, los compañeros fueron liberados. Siete estudiantes serán sometidos a juicio.

Este caso de terrorismo de Estado por parte del gobierno de centro-izquierda en beneficio de la Otan y el imperialismo norteamericano es un ensayo general: están preparándose para reprimir el movimiento contra la guerra, especialmente cuando es inminente la invasión de las tropas de tierra de la Otan a Kosovo. Todas las organizaciones obreras deben estar alertas.