La Asamblea de Chilenxs en Buenos Aires, por la huelga general y una Asamblea Constituyente popular, libre y soberana

Declaración elaborada para la movilización del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia en apoyo a la rebelión.

Crédito: Catalina Reyes

El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia se moviliza esta tarde (martes 5) en apoyo a la rebelión del pueblo chileno, repudiando la represión del gobierno de Sebastián Piñera, exigiendo su dimisión y planteando el fin de las políticas de ajuste y que se vaya el FMI de Latinoamérica.


Para esta ocasión, la Asamblea de Chilenxs en Buenos Aires elaboró un escrito que arroja importantes definiciones en relación con el proceso político que se vive en el país vecino. Reproducimos el texto completo.


Declaración de la Asamblea de Chilenxs en Buenos Aires en la convocatoria con el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia.


Hace dos semanas, Chile se levantó no contra un ajuste en los precios del transporte, sino contra 46 años de modelo Pinochetista que ha llevado a cada ámbito de la vida de lxs trabajadorxs –el trabajo, la salud, la educación, la vivienda-, a la más profunda y criminal miseria.


La respuesta del Gobierno de Piñera fue reprimir violentamente sacando a los militares a la calle y en trabajo conjunto con Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI) dar rienda suelta a una violación sistemática de los DDHH, cobrando un saldo de decenas de asesinadxs, decenas de mujeres y hombres violadxs en las comisarías, centenares de mutiladxs, centenares de desaparecidxs, y miles de heridxs y detenidxs que serán condenados por Ley Antiterrorista. Sin embargo atrás quedó el miedo, porque ni el horror de la represión ha impedido que el pueblo chileno siga resistiendo heroicamente en las calles.


Lo que Piñera y los medios de comunicación hegemónicos han tildado como un estallido social espontáneo, para nosotrxs es una gran y acumulada factura histórica de lxs trabajadorxs de Chile, porque solo podría ser sorpresivo para lxs enajenadxs que se alinearon a las largas sombras de la Dictadura. No existe dicha espontaneidad porque hay precedencia: décadas de resistencia y lucha del pueblo mapuche, gigantescos movimientos estudiantiles -como el mochilazo del 2002, la revolución pingüina del 2006, el movimiento por educación pública del 2011-, el movimiento NO+AFP desde el 2016, las movilizaciones del movimiento de mujeres y disidencias del 2018, y las movilizaciones ambientalistas contra las zonas de sacrificios, entre otros movimientos.


Si bien todas estas luchas tuvieron su correlato en la traición de las dirigencias que llevaron nuestras demandas a un saco roto, el estallido de octubre obligó a Piñera a recular en algunos aspectos: debió poner fin, al menos en lo declarativo, al Estado de Emergencia, y lo vimos recurrir también a un vergonzoso cambio de Gabinete. Aunque los pueblos de Chile aplauden estas pequeñas presiones que han construido, no pierden de vista que con esto el Gobierno y sus cómplices buscan por un lado, desmovilizarlos inútilmente, y por otro, maquillar su responsabilidad política en los crímenes de lesa humanidad.


En este contexto es que también la presión internacional con las cancelaciones de las cumbres APEC y COP25 -eventos en los que Piñera pretendía exhibir a su Gobierno como líderes de un país-oasis, desarrollado y preocupado por el cambio climático-, representa un duro golpe a las relaciones internacionales del régimen económico y político de Chile.


El mundo va reaccionando ante el profundo fracaso de un modelo que se vendió como ejemplo de estabilidad económica impulsada por la apertura comercial, pero que ahora revela el ocultamiento de una creciente desigualdad y abusos que tornaron la vida del pueblo trabajador insostenible. Las calles de Chile han obligado a la comunidad internacional a reconocer que no sólo está atado al FMI como el resto de los países de Latinoamérica, sino que además se instauró con un régimen brutalmente represivo que garantizó todos estos años la intervención implacable y unilateral de las políticas del imperialismo.


En esa línea es que como Asamblea nos organizamos alrededor de un objetivo principal: profundizar la presión internacional y agotar en ese camino todas las herramientas que estén a nuestro alcance. Por esto, saludamos, abrazamos y agradecemos a esta convocatoria del Encuentro Memoria Verdad y Justicia, que entendemos como una gran expresión de solidaridad del pueblo argentino hacia la rebelión popular chilena, porque el rol potencial que tenemos todos aquellos que estamos fuera de Chile, puede significar salvar de la tortura a lxs detenidxs, o librar a manifestantes que están siendo procesados para meterlos a la cárcel. Y en definitiva, el rol potencial de la presión internacional puede significar la aparición con vida de aquellxs detenidxs que aún están desaparecidxs. Nuestra presión desde aquí puede significar salvar vidas.


Saludamos también el proyecto presentado en la Cámara de Diputadxs de Argentina que propone la ruptura de relaciones con el Gobierno asesino de Piñera exigiendo la libertad y aparición con vida de todas las personas detenidas desaparecidxs del territorio, e instamos a todos los partidos con representación en el parlamento argentino a apoyar dicho proyecto.


Queremos aprovechar la contingencia, para saludar y abrazar a la distancia la decisión de esta semana del sindicato de Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de "parar el país" y en 5 días dejarlo sin combustible; y saludamos enérgicamente también a la Unión Portuaria y otras organizaciones sindicales que firmaron hace cuatro días la declaración titulada "Avanzamos a la Huelga General para la Asamblea Constituyente", donde han decidido "como fiel reflejo de lo que exige la calle (…) constituir un comité de huelga que allane el camino a una paralización efectiva de todos los sectores y que avance hacia una Huelga General que demuestre nuestra fuerza y convicción de transformar Chile para siempre".


Finalizamos haciendo un llamado general a todas las organizaciones y partidos a nivel internacional a que se sumen a la solidaridad y apoyo con todos los pueblos que se levantan contra la miseria y la represión, y particularmente los llamamos a participar de las próximas convocatorias en apoyo a Chile levantando en las calles las siguientes consignas:


¡Fuera Piñera!


¡Basta de represión!


¡Aparición inmediata y con vida de lxs detenidxs desaparecidxs!


¡Juicio y castigo a los criminales de lesa humanidad!


¡Fuera el FMI de América Latina!


¡Avanzar a la Huelga General!


¡No deponer la lucha hasta una Asamblea Constituyente, popular, libre y soberana!


¡Que viva la heroica lucha de los pueblos de Chile!