No quiero empezar sin decir que se podrían estar realizando en estas horas varios actos como éste en la enorme geografía argentina; entonces, las primeras palabras para los miles de compañeros obreros, piqueteros trabajadores, estudiantes y luchadores que desde San Pedro de Jujuy hasta Río Gallegos hoy acompañan la Refundación de la IV Internacional.

En el Congreso por la Refundación, una gran parte de los delegados del PO fueron representantes del movimiento piquetero de todo el país. Pero no fueron al Congreso como piqueteros, o como militantes del Polo Obrero, ni tan sólo como militantes del Partido Obrero; fueron como constructores del partido mundial de la revolución proletaria. A esa escala se ha elevado la vanguardia del movimiento piquetero argentino.

Sentimos una enorme responsabilidad, porque el programa y las resoluciones de la IV internacional colocan al movimiento piquetero como un aporte a la organización y a la lucha de la clase obrera mundial, en particular, a partir de organizar a los desocupados que hoy son más de mil millones a escala del planeta, y este movimiento piquetero ha dado los pasos para integrarlos a la clase obrera, a la revolución proletaria y a la lucha por el socialismo en el mundo, sacándolos de la degradación y de la barbarie a que nos somete el capitalismo.

Empezamos la semana de la refundación de la IV con la Asamblea Nacional de Trabajadores, seguimos con los cortes de ruta en la provincia de Buenos Aires, con el formidable piquete en defensa de los trabajadores despedidos de la Obra Social gráfica, con la movilización por Transporte del Oeste, y ayer, jueves, nos colocamos en el centro de la situación política planteando una estrategia revolucionaria frente a la corrupción de los aparatos policiales, de la Justicia, colocándonos como una escuela de estrategia y haciendo esa gran intervención de anoche, y ese acto impresionante de la Plaza de Mayo con los familiares de las víctimas del gatillo fácil, que ha relanzado la lucha contra la impunidad de los crímenes de Kosteki y Santillán, de todos los caídos en la lucha, de todas las víctimas del gatillo fácil.

En este país, compañeros, la única oposición política es el movimiento piquetero, y eso quiere decir que no sólo es una oposición masiva y de lucha, no sólo disputa en todos los terrenos del movimiento popular; esa oposición política está planteando el gobierno de la clase obrera, que es la causa internacional de la refundación de la IV Internacional.