Lutte Ouvrière en la “Unión de Izquierdas”


La organización trotskista francesa Lutte Ouvrière presentará listas comunes con el PS y el PC en las elecciones municipales de marzo próximo en numerosas ciudades. El Congreso de LO, realizado recientemente, ratificó esta orientación, al mismo tiempo que rechazó la presentación de listas municipales en común con la LCR.


Es un viraje histórico. Lutte Ouvrière se incorpora, por primera vez, a la “Unión de Izquierdas” (PS-PC) a la que siempre criticó y combatió.


El giro es una medida de las conclusiones conservadoras que sacó la dirección de Lutte Ouvrière acerca del enorme retroceso que sufrió en las últimas elecciones presidenciales (en las que perdió casi dos millones de votos). La función de los acuerdos con el PS y el PC es mantener los 33 concejales que LO logró en 2001 mediante la presentación de listas independientes.


Lutte Ouvrière, que se ha caracterizado por negar de una manera sistemática las potencialidades revolucionarias de la crisis en Francia (e internacionalmente), ha convertido a sus concejalías en un fin en sí mismo. Se integran a la ‘izquierda’ del régimen político francés… en el momento de mayor derechismo y desprestigio popular de estos partidos.


A la hora de justificar estas alianzas, LO sostiene que quiere impedir que su presentación independiente favorezca a la derecha y le permita mantener o reconquistar municipios de manos de la “izquierda”. Con el mismo argumento, Lutte Ouvrière debería abstenerse de presentar sus candidatos en las elecciones presidenciales y parlamentarias y, en general, renunciar a cualquier intervención política independiente.


“La ofensiva de Sarkozy cambió la situación”, sostiene. Pero ni el PS ni el PC han jugado ningún papel frente a la ofensiva de Sarkozy. Una parte de la dirección del PS se pasó directamente al campo del gobierno; los que no lo hicieron respaldaron la ofensiva contra el régimen jubilatorio de los ferroviarios y los trabajadores de la RATP.


Pero Lutte Ouvrière va todavía más lejos. Georges Kaldy, uno de sus principales dirigentes, declaró a Le Monde (28/11) que “están abiertos a la participación en un ejecutivo local: ‘administrar un municipio no nos incomoda. Hay pequeños márgenes para hacer avanzar nuestras propuestas’…”.


Ya no se trata, simplemente, de una lista parlamentaria (concejales) común con los partidos de la izquierda del régimen sino de la disposición a co-gobernar con ellos los municipios. Un gobierno municipal es parte integral del Estado burgués… además de ser un ámbito donde se cocinan grandes negocios. No hay ninguna diferencia cualitativa entre un gobierno municipal y el gobierno nacional; se trata, apenas, de una diferencia de “tamaño”.


La disposición a “co-administrar” con el PS y el PC un gobierno municipal enteramente burgués (aunque de “izquierda”) es una paso hacia la integración al Estado burgués y a la co-gestión de los negocios de la burguesía. Con el mismo criterio — la existencia de “pequeños márgenes” para “hacer avanzar” sus propuestas — Lutte Ouvrière debería haber integrado el gobierno de Jospin y la “izquierda plural”. ¿No había, también allí, “pequeños márgenes”? ¿O la independencia de clase no se aplica a los municipios?


La formación de listas municipales con el PS y el PC es un franco y profundo retroceso político que lleva a Lutte Ouvrière por el camino de la integración al estado imperialista francés.