Israel y la prensa sionista no se cansan de repetir que Hezbollah es armada por Irán y por Siria, como si esta circunstancia le quitara a la organización libanesa su carácter independiente en la historia y la política de Medio Oriente. Pero cualquiera fuese esa asistencia militar no guarda ni lejana comparación con la que recibe el Estado sionista de Estados Unidos. Los 3.000 millones de dólares de ayuda militar y económica de Washington a Israel representan más del 20% del presupuesto de defensa israelí. “Bajo el gobierno de Bush, informan los investigadores de la asociación Foreign Policy in Focus (27/7), de 2001 a 2005, Israel recibió 10.500 millones de dólares en financiamiento militar al extranjero —el programa de ayuda militar más grande del Pentágono— y 6.300 millones de dólares en entregas de armamento norteamericano. La cifra de ayuda es mayor que la de transferencia de armamento porque incluye el financiamiento de los principales acuerdos de armas cuyo equipamiento aún debe ser completado. El más prominente de estos contratos es una venta por 4.500 millones de dólares de los 102 F-16 de Lockheed Martín a Israel”.

En la última década, Estados Unidos ha transferido ayuda militar por más de 17 mil millones de dólares a un país de sólo siete millones de habitantes.