Stalinistas y 'trotskistas' piden "producción y responsabilidad"

Como ocurre a lo largo y a lo ancho de Europa, el gobierno derechista de Portugal ha lanzado un fuerte plan de "austeridad" y una reforma laboral flexibilizadora, en línea con lo reclamado por la llamada "troika" compuesta por el Banco Central Europeo, el FMI y la Unión Europea. Los desastrosos resultados que está provocando el plan de ajuste han abierto una crisis política, con amplios sectores de la oposición y la patronal que reclaman una 'renegociación' de las condiciones impuestas por la troika. El máximo líder de la cámara patronal advirtió que el país corre riesgo de "colapsar" (Financial Times, 22/2).

Al mismo reclamo se ha sumado la CGTP, central sindical orientada por el Partido Comunista, que convoca a una huelga general para el distante 22 de marzo. El secretario general, Arménio Carlos, se reunió con los delegados de la troika que llegaron al país para plantear, entre otras cosas, la necesidad de "aumentar los montos del plan de rescate". "La dinamización del sector productivo, para reducir las importaciones y la deuda, la promoción del empleo de calidad y el combate de la precariedad y una nueva política de ingresos que asegure el desarrollo económico son algunas de las propuestas de la CGTP para la reunión" (Agencia Lusa, 23/2). El manifiesto que convoca a la huelga plantea la necesidad de "un cambio de política", que impulse "la renegociación de la deuda (plazos, intereses, montos) y el alargamiento del período para la reducción del déficit", además de "la adopción de una política que promueva el crecimiento económico, la inversión y la dinamización del sector productivo".

Esto ocurre a menos de un mes del XII Congreso de la CGTP. La llegada de Arménio Carlos a la secretaría general de la CGTP fue vista como un giro a la izquierda. La presencia mediática del PC y la CGTP como principales referentes de la oposición por izquierda va paralela a la crisis del Bloco de Esquerda, un frente integrado, entre otros, por la IV Internacional oficial (a la que acaba de adherir, con gran sentido de la oportunidad, el MST de Argentina), que pasó de un 9,8% en las elecciones legislativas de 2009 a 5,17% el año pasado y perdió la mitad de sus legisladores. El Bloco señala que está "en sintonía" con los reclamos de la CGTP y que es necesaria una "renegociación" de la deuda. João Semedo, diputado del Bloco, participó en una reunión de los delegados de la troika con diferentes bloques parlamentarios, mientras Francisco Louça, ex candidato presidencial del Bloco y dirigente histórico del mandelismo, planteó que "es indispensable que el país responda a las dificultades económicas con producción, con responsabilidad, con la protección de la agricultura" (Esquerda.net, 12/2).