Un frenteamplista al rescate de las Fuerzas Armadas

Las confesiones de Tabaré Vázquez

El ex presidente uruguayo Tabaré Vázquez señaló, ante un grupo de estudiantes, que había manejado la hipótesis de una guerra con Argentina durante los momentos más álgidos del conflicto por la radicación de la papelera Botnia.

Al desmenuzar las confesiones, se advierte que el primer presidente ‘socialista’ de Uruguay consideraba a los asambleístas entrerrianos casi como ecoterroristas deseosos de dinamitar la planta de Botnia; que en función de esta apreciación movilizó al Ejército para proteger la planta; que estaba dispuesto a ir a la guerra para defender a los monopolios papeleros que contaminan el ambiente binacional y depredan el suelo; y que solicitó, para dicha misión, el concurso del imperialismo norteamericano y de Bush.

Fuerzas Armadas

Las declaraciones de Vázquez aparecen en medio de la agitación política planteada ante la posibilidad de que prescriban los crímenes de la última dictadura en noviembre próximo, debido a un fallo de la Corte que los consideró ‘ilícitos comunes’ y no crímenes de lesa humanidad. La bancada del Frente Amplio intentó este año derogar la Ley de Caducidad -una especie de Punto Final a la uruguaya-, lo que no logró por la deserción de un legislador propio, quien se encolumnó con la oposición blanqui-colorada y con el propio presidente Mujica, opuesto a la derogación. Ahora, sectores del Frente Amplio estarían analizando un proyecto para declarar imprescriptibles los delitos de la dictadura.

En esa crisis, las palabras de Vázquez tienen un propósito claro: rescatar a las Fuerzas Armadas y su papel en la “defensa nacional”.

El ex presidente frenteamplista no sólo ha mostrado su vocación defensora de los capitalistas contaminadores, sino también de los represores.