Un ratón antiobrero: Disney suspende sin pago a miles de trabajadores

El gigante del entretenimiento Disney ha hecho ganancias tan enormes que ha podido ir comprando rivales como Pixar(2006), Marvel(2009), Lucasfilm (2012) y el conglomerado de Fox (2019). Ocupa de esta manera el centro de un enorme emporio que incluye canales de televisión, streaming, estudios de cine, historietas, videojuegos y un catálogo de merchandising interminable, aparte de cruceros de lujo y 12 parques temáticos.

Frente al avance de la pandemia la Walt Disney Co. le ha comunicado a sus 223 mil trabajadores que, salvo una minoría que cumple tareas esenciales que seguirán durante la cuarentena, sus empleados “cuyos trabajos no son necesarios en este momento” quedaran suspendidos sin goce de sueldo desde el 19 de abril. Se les seguirá pagando los aportes patronales y el seguro médico, y quienes tengan días de vacaciones pagas podrán tomárselas en estas fechas. Fuera de eso, la empresa avisa que pueden pedir la limitada asistencia que algunos gobiernos están destinando a los desocupados.

Los ejecutivos de Disney han tomado reducciones parciales o totales de su paga para mostrar que el ajuste lo pasaran con un esfuerzo de “toda la empresa”.

Orlando, un pueblo fantasma

En el Disney World de Orlando, Florida, la empresa ya ha firmado los acuerdos con los sindicatos que aceptaron la modalidad de suspensión y que agrupan 43.000 trabajadores. Entre trabajadores sindicalizados y no sindicalizados, la empresa emplea en la ciudad y sus alrededores unas 77.000 personas, de las cuales sólo 200 se mantendrán empleadas en la guardia mínima. La publicación económica Forbes consigna que esta medida significa la triplicación de la tasa de desempleo de la ciudad, una verdadera bomba económica y social que promete generar un efecto cascada en empresas vinculadas al negocio del turismo en el tramo central de Florida.

Para el gigante del entretenimiento, son los empleados los que deben absorber el costo de la crisis generada por la pandemia. La aceptación de esto por los sindicatos, y el Estado norteamericano muestra que, sin una intervención independiente de los trabajadores, existe una sintonía total para preservar las millonarias reservas de las empresas a expensas de las familias obreras.

En el “reino mágico” de Disney World también haría falta que se levante el planteo de pago integral de salarios a costa de las empresas y control popular de la cuarentena que el Partido Obrero levanta en Argentina. Las arcas del ratón pueden costear esto, y si lo niega, bien harían sus trabajadores en exigirle que abra sus cuentas.