Uruguay: propagandismo y disolución del PT

En las elecciones uruguayas presidenciales y parlamentarias del 27 de octubre del año pasado, nuestro Partido Obrero llamó a votar las listas del Partido de los Trabajadores (PT U) de Uruguay.

Pero el pasado domingo 27/9, en las elecciones municipales uruguayas no pudimos pronunciarnos en igual sentido. Por la simple razón que el PT (U), sin ningún tipo de explicación pública, hizo mutis por el foro y decidió no presentar batalla contra las candidaturas burguesas y frentepopulistas.

Si alguien busca en las páginas de su periódico (Tribuna de los Trabajadores) algún análisis o posición política frente a las elecciones, malgastará su tiempo, porque no lo va a encontrar. Aplica la política del avestruz: si no nombro las elecciones estas no existen. Aunque sean un acontecimiento político nacional: votó el 85% del padrón.

Pero…

No solo no ha presentado lista propia, renunciando a batallar por la independencia de clase, sino que ni siquiera llamó a votar en blanco o nulo contra las alternativas burguesas y frentepopulistas. Es una “libertad de voto” que significa una adaptación o apoyo encubierto al Frente Amplio (FA).

Esto es un salto en calidad en la involución política que viene sufriendo el PT (U).

Se está cruzando una frontera en lo que significa la intervención militante en la lucha política de un partido que se reclama revolucionario. Y se está capitulando frente a la presión política que ejerce el FA sobre la vanguardia obrera y revolucionaria.

La no intervención electoral del PT lo sume más que nunca en la tendencia propagandista en la que ha derivado el grupo de Altamira que ha roto con nuestro Partido Obrero. Probablemente, su relación con este grupo ha sido un factor importante para que asumieran este silencio político capitulador.

El seguidismo del PT (U) al altamirismo lo aleja cada vez más de la intervención política viva en la lucha de clases, osificándolo en una estación repetidora de dicho grupo.

En las elecciones nacionales de octubre del 2019 el PT U sacó un resultado ultramarginal (0,06%) con alrededor de 1.500 votos. Esto después de 40 años de existencia. El retroceso (debacle) electoral sufrido en esa elección, es -en cierta medida- producto de la política sectaria y propagandista que viene desarrollando el PT (U) desde hace un par de años. Sin poder presentar un balance político de la marginalidad en que se ha colocado la dirección del PT (U) ha decidido –en silencio- no presentarse a elecciones. Han pasado al mayor de los cretinismos antielectorales, el cretinismo vergonzante y capitulador ante el FA. Su posición es similar a la que adoptó el NPA de Francia en las elecciones presidenciales últimas donde se negó a hacer campaña por el voto en blanco contra las dos opciones burguesas en la segunda vuelta, empujando de hecho a una “libertad de voto” capituladora frente a Macron, el candidato “demócrata” del imperialismo contra el fascismo de Le Pen.

En una última nota publicada en el periódico del PT U (transformado desde hace un tiempo en un débil blog ocasional) se consuela, sin embargo, con que “Uruguay (va) rumbo a Chile”. Y afirma: “nos negamos a renunciar a una acción política independiente en un período de tendencias a las explosiones sociales y levantamientos, para confinarnos en el estrecho callejón de ‘frenar’ a la derecha”. Es un consuelo que deja al activismo obrero, al FA como única referencia para enfrentar a “la derecha”. No hay alternativa de izquierda.

Pocas veces se ha visto mayor expresión de impotencia política. El avestruz se sienta a esperar que la evolución de la crisis llegue al punto del estallido de la rebelión chilena. “Hay que prepararse”, termina el artículo del PT (U). Para prepararse –algo elemental- hay que militar e intervenir en la lucha política y de clases.

Por otra parte, en el Chile radicalizado y con masas movilizadas también hay elecciones. ¿La orientación altamirista llevará también a desconocerlas?

La militancia del PT U debe reaccionar frente a esta debacle.

https://prensaobrera.com/internacionales/uruguay-detras-de-las-elecciones-viene-la-batalla-contra-el-ajuste/