Internacionales
2/7/1998|591
Victoria de los partidos pro-yanquis
Seguir
A pesar de lo que repitieron durante semanas los candidatos, ni la autodeterminación nacional ni la democracia política estuvieron en juego en las elecciones parlamentarias que acaban de celebrarse en Irlanda del Norte. El ‘gobierno compartido’ que saldrá de estas elecciones entre los ‘unionistas’ (partidarios de mantener la ‘unión’ con Gran Bretaña) y los nacionalistas mantendrá a Irlanda del Norte bajo jurisdicción británica. Así fue establecido en el ‘acuerdo de paz’firmado en abril bajo el auspicio, fundamentalmente, de los Estados Unidos.
A pesar de la mayoría protestante, se impuso el católico SDLP de John Hume, estrechamente relacionado con el gobierno irlandés del sur y con el imperialismo norteamericano. El principal partido ‘unionista’, el UPP de David Trimble, al que se consideraba seguro ganador, arribó en segundo lugar. Muchos de sus habituales seguidores lo abandonaron para votar, contradictoriamente, unos por los partidos ‘unionistas’ opuestos al ‘acuerdo de paz’; otros, por el SDLP. El Sinn Fein- IRA resultó tercero.
Los opositores de la derecha protestante al ‘acuerdo de paz’ fueron “marginalizados” (Financial Times, 26/6). Quedó diseñado, de este modo, un‘cogobierno unionista-nacionalista’ con el respaldo, en minoría, del Sinn Fein. El ‘acuerdo de paz’ establece, por primera vez desde la partición de Irlanda en 1921, el reconocimiento del ‘estado’ del Ulster bajo dominación británica.
La Irlanda ‘pacificada’ se convertirá así, como ya lo es la república del sur, en una base económica del imperialismo norteamericano para ‘penetrar’ en la Unión Europea. Precisamente, desde que comenzaron las ‘negociaciones de paz’, se registra en ambos lados de la ‘frontera’ un ingente proceso de inversiones, encabezado por los capitales estadounidenses, que tiene en vista la penetración en la Unión Europea.
De modo que aunque el gobierno británico retacee su ingreso a ella, el proceso en Irlanda del norte anuncia la inevitable incorporación inglesa a la U.E. (¡o la separación del Ulster promovida por Estados Unidos!).