Zelenski discute con el FMI la “reconstrucción” de Ucrania

La titular del FMI y el presidente ucraniano

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, informó días pasados por Twitter que se había reunido con la titular del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, para discutir la situación financiera del país y la reconstrucción de la posguerra. “Tenemos planes claros para ahora, así como una visión de las perspectivas”, agregó.

La economía ucraniana se ha derrumbado a raíz del conflicto armado con Rusia. Se estima una caída de al menos el 35% del PBI para este año. Los daños en infraestructura son cuantiosos y la recaudación impositiva cayó en picada libre. “Solo la mitad de nuestra economía está trabajando”, declaró el primer ministro Denys Shmyhal, quien visitará Washington esta semana en la búsqueda de asistencia financiera.

Hasta aquí, Estados Unidos, la Unión Europea y los organismos financieros internacionales (FMI y Banco Mundial) han liberado distintas partidas (además del apoyo militar), pero están por debajo de las expectativas del gobierno ucraniano, que en boca de uno de sus asesores, Oleg Ustenko, solicitó 50 mil millones de dólares, una cifra que resulta de multiplicar pérdidas mensuales por 7 mil millones de dólares por aproximados siete meses de guerra (Republic World, 18/4).

La “cooperación” económica occidental, en cualquier caso, refuerza la dominación del imperialismo sobre Ucrania. Los planes del FMI ya habían puesto la soga al cuello de Kiev antes del conflicto armado. Desde 2014, se firmaron distintos paquetes de rescate bajo la estricta condición de un avance en las reformas estructurales (despidos, privatizaciones, ajuste fiscal, reforma energética), que han implicado un severo golpe para las masas. La deuda externa se convirtió, a su vez, en un yugo, alcanzando al día de hoy el 80% del PBI, según algunos cálculos (Open Democracy, 2/3). Y se estimaban pagos al Fondo este año por más de 2 mil millones de dólares en concepto de vencimientos (ídem).

La reconstrucción de posguerra que menciona Zelenski sería la oportunidad de un gran negocio para el gran capital, sobre las ruinas del país. Aunque el conflicto recién está en pleno desarrollo, ya hay algunos que hacen sus propuestas. En Financial Times (7/4), un exministro de finanzas polaco, Grzegorz Kolodko, sugiere la creación de un Fondo Europeo de Reconstrucción para financiar inversiones; una reducción de la deuda, condicionada a la “desoligarquización” del país (léase, el desplazamiento de los oligarcas locales por firmas extranjeras); la construcción de una “economía social de mercado”, eufemismo para referirse a un capitalismo en regla; y la colaboración de China en la restauración de la infraestructura.

Desde el portal de Al Jazeera (19/4), el investigador Maximilian Hess postula un Plan Marshall para Ucrania. El primero, se entusiasma, “no solo reconstruyó la economía europea después de la segunda guerra mundial, sino que también creó lucrativas oportunidades de inversión para firmas estadounidenses y, en última instancia, nuevos mercados de capital”. Ahora -opina- podría ocurrir lo mismo. “Los inversores afectados por la condonación de deudas a Ucrania pueden ser invitados en condiciones preferenciales”, añade. Los fabricantes de armas, cabe señalar, ya habían visto incrementarse sus patrimonios al comienzo de la guerra.

El gran capital busca transformar una fuente de inmensas penurias para las masas en una oportunidad política y económica, aunque esa tentativa aparece condicionada por la extensión del conflicto bélico y la propia crisis mundial.

Fuera el imperialismo y la Otan del este europeo. Fuera Putin de Ucrania.