Juventud

18/9/2008|1055

16 de septiembre: La lucha de los secundarios, crecimiento y desafíos

Este martes 16 de septiembre, una masiva movilización encabezada por más de cuarenta centros de estudiantes secundarios se movilizó a Plaza de Mayo con estudiantes universitarios y terciarios, y con docentes municipales y de la UBA. Expresó la voluntad de sostener una lucha de conjunto en defensa de la educación.

Aplastemos la intentona represiva

El gobierno de Macri no avanzó en la restitución que había prometido de 16.000 becas. Muy por el contrario, se ha volcado a atacar abiertamente al activismo que dirige los Centros de Estudiantes: intentó dejar libres a las compañeras que integran la Comisión Directiva del Centro del Belgrano y amenazó hacer lo mismo con compañeros del Esnaola y del Rawson.

Los estudiantes del Belgrano realizaron asambleas en respuesta a los ataques de los directivos, con el apoyo de otros colegios secundarios que se habían movilizado para defender a las compañeras expulsadas: lograron que no las echaran. Fue un claro triunfo.

El matonaje K

El macrismo tiene el auxilio de un grupo de choque del kirchnerismo. En la movilización del 16, una columna de Sudestada-Libres del Sur se coló a golpes en medio de la columna estudiantil, contra todos los acuerdos que previamente se habían establecido en relación con el formato de la marcha. Incluso en Plaza de Mayo, el grupo siguió agrediendo a los cordones de seguridad que habían organizado de forma conjunta los compañeros secundarios, terciarios y universitarios.

Libres del Sur ve a la lucha contra Macri como una operación político-electoral para 2009 que beneficie al pejotismo porteño y a los restos mortales del Frente para la Victoria. No los moviliza la causa estudiantil. El repudio de la gran mayoría de los estudiantes los obligó a retirarse de la Plaza, e impidió que boicotearan la lectura del documento que repudia claramente la política del gobierno nacional (véase siguiente nota).

Reforzar

Es central desarrollar la lucha contra la prepotencia privatizadora y clerical de Macri. Necesitamos fortalecer a los centros de estudiantes, cuerpos de delegados y comisiones directivas combativas en todos los colegios.

Sobre esta base, necesitamos una Coordinadora de Secundarios que agrupe al conjunto organizado de estudiantes. Luego de varios desentendimientos, numerosos sectores manifiestan la voluntad de construir una Coordinadora que nos agrupe en nuestra totalidad; pongamos manos a la obra. La CES, que desde hace dos años viene empeñada en esta tarea en forma sistemática, va a impulsar este objetivo con todas sus fuerzas.

El 16 de septiembre encontró en las calles a un movimiento secundario cada vez más vital. Seamos la semilla de la nueva generación.