Nuestra organización cumple 50 años de lucha y de no capitular bajo ningún gobierno, defendiendo siempre la independencia política de la juventud y la perspectiva de unidad obrero-estudiantil. Por eso queremos cerrar este gran 2022 de lucha con un brindis de la juventud en la facultad de Veterinaria (UBA), en el cual trazaremos los desafíos para seguir organizades apoyando las luchas en curso.

Un año plagado de luchas

En 2022 volvimos con toda a los secundarios, los terciarios y las universidades. Tomamos colegios contra las pasantías gratuitas de Larreta, dimos la lucha contra la Unicaba y enfrentamos el fraude en la Fuba. Desarrollamos la articulación estudiantil-territorial de nuestros lugares de estudio en todas las villas de capital y en provincia de Buenos Aires; estuvimos junto a los trabajadores en sus luchas, como las que llevó adelante la Unidad Piquetera, el Sutna y los Residentes y Concurrentes.

De la mano del movimiento piquetero luchamos contra el plan de hambre del gobierno, conquistamos la compatibilidad del Potenciar Trabajo y la beca Progresar, y, ahora, tenemos el desafío abierto durante todo el año contra el intento de Tolosa Paz de recortar planes sociales para llegar a las metas del Fondo.

El método para la construcción de una juventud revolucionaria estudiantil y piquetera es el de la elaboración colectiva: por eso en septiembre realizamos un congreso con 2.000 personas en todo el país de la UJS y la Juventud del Polo Obrero.

50 años y hasta la revolución

Una intervención de estas características, lógicamente, no nace de un repollo. Nuestra organización se fundó hace exactamente 50 años, en septiembre de 1972, al calor de un país que transitaba el sendero del Cordobazo y la organización obrera y popular. Luego enfrentó a la dictadura, a los ataques del Fondo Monetario Internacional, a las reformas antieducativas y ajustadoras de Carlos Menem, a los recortes presupuestarios de De La Rúa.

Con ese movimiento configuró, con el método del frente único de lucha, una de las experiencias más importantes del movimiento estudiantil en el último tiempo: la Fuba piquetera, que fue hija del Argentinazo, estuvo en el Puente Pueyrredón y las ANT, se juntó con el movimiento piquetero y el movimiento obrero ocupado y organizó la lucha por la democratización de la Universidad. Es esa Fuba la que peleó contra la Coneau y el desguace de las carreras, junto a les docentes, la que peleó contra el Presupuesto Cero de Macri y las reforma jubilatoria. La que estuvo en las calles junto a millones por el aborto legal.

Hoy, esa perspectiva de lucha encuentra un desbarranque profundo del peronismo que, con un gobierno ajustador, hambreador y fondomonetarista, entrega al país a los intereses del capital financiero. Es por eso que ponemos toda esta tradición política de lucha al servicio de la construcción de un nuevo movimiento popular, con banderas socialistas, para que se vayan los políticos capitalistas.

Por un 2023 en lucha

Es por esto que queremos cerrar el año con un balance y una proyección de nuestra intervención, con la participación de históricos dirigentes estudiantiles y fundadores de la UJS; y con la intervención de Néstor Pitrola, en su calidad de dirigente nacional del Partido Obrero pero también como militante estudiantil y obrero que intervino en procesos de lucha como el Cordobazo; Gabriel Solano, nuestro dirigente en Capital, dirigente histórico de la juventud; y Jaqueline Carmessi, dirigente de la Unión de Juventudes por el Socialismo a nivel nacional y concurrente, que se encuentra encabezando la lucha desde el Hospital Penna por salario y ART.

¡A partir de medianoche empezamos la fiesta!

Queremos un 2023 que nos encuentre preparades para enfrentar las ofensivas del gobierno, de la mano de un movimiento popular con banderas socialistas que esté con el pueblo y no con el FMI.