Juventud

26/9/2022

Acuña miente para atacar a la comunidad educativa del Mariano Acosta

El colegio se encuentra tomado desde el viernes y este lunes deliberará en asamblea cómo continuará con la medida.

Soledad Acuña - Ministra de Educación de CABA.

El viernes pasado comenzó la toma de escuelas secundarias en CABA, como otra instancia de la lucha que vienen llevando adelante los estudiantes contra las pasantías aborales precarizadoras que impusieron Larreta y Acuña, la escasez y el mal estado de las viandas, las falencias edilicias y las reformas de vaciamiento de la educación pública que confluyen en la secundaria del futuro. La ministra de Educación de la ciudad fue entrevistada sobre la toma del colegio Mariano Acosta, el cual hoy a las 17hs deliberará en asamblea cómo seguir con la medida. Allí continuó atacando y amedrentando a los estudiantes con provocaciones llenas de falacias y alegando que la toma sería fogoneada por el oficialismo. Una forma de instalar la grieta para meter la cuña al interior de la comunidad educativa y enfrentar a la población contra los estudiantes que luchan por sus derechos más elementales.

Allí Acuña alegó que la medida “es inentendible. No hubo reclamos que se hayan discutido antes. Pasaron de 0 a 100 de una. No hubo pedidos de diálogo o reuniones” y agregó: “No sabemos en particular a qué se refieren con el tema de los problemas edilicios. Sobre las viandas no conocemos la demanda porque reciben las que fueron solicitadas por aquellas persona que cumplen con los requisitos de vulnerabilidad socioeconómico. Es una demanda absolutamente política”, criticó Acuña. El cinismo de la ministra es brutal, los desmadres de infraestructura son moneda corriente en Capital Federal; hace semanas se murió una nena de desnutrición en una escuela y la paupérrima calidad y cantidad de las viandas viene siendo denunciada por docentes, estudiantes y familias hace rato, sobre todo de las más pobres que no pueden garantizarle las 4 comidas a sus hijos por lo que es uno de los reclamos principales del movimiento piquetero.

Los pibes también son víctimas de las pasantías laborales que le garantizan mano de obra gratuita a las patronales y que no tienen nada que ver con la formación educativa: van a call center, a cines, incluso hubo un intento de trabajar monitoreando para la Policía de la Ciudad. El Consejo Federal de Educación ya votó la implementación de la reforma antieducativa en todas las provincias y lo que el gobierno de la ciudad busca implementar en CABA porque para ajustar a la educación, no hay grieta.

A su vez, es una mentira en toda la línea que los estudiantes no hayan reclamado instancias de diálogo previas. Después de varias marchas y medidas de lucha de estudiantes secundarios contra el GCBA, los pibes se cansaron de que “Larreta no escuche” y de la situación de los colegios. Kianara Ledo, alumna del centro de estudiantes de la Escuela Normal Superior (E.N.S. 2) Mariano Acosta sostuvo que: “Primero nos movilizamos, después elevamos una carta a la ministra (de Educación porteña) Soledad Acuña explicándole todos los reclamos de la comunidad educativa: falencias edilicias, falta de viandas, reformas inconsultas que tomaron, secundaria del futuro y como nos marginan de las decisiones que se toman en nuestros colegios”. Acuña y Larreta desconocen sistemáticamente los reclamos de los estudiantes, pero cuando los pibes toman los colegios desenvuelven un ataque artero.

Incluso el vicerector del Mariano Acosta, Julio Pascuarelli, acompañando el reclamo de los estudiantes denunció “tenemos severas situaciones de riesgo por la falta de arreglos, docentes y estudiantes lastimados porque no hay mantenimiento en la escuela, nos reunimos a principio de año con la empresa a cargo pero tardan demasiado, las calderas no funcionaban y empezaron a hacerlo en julio, casi agosto, no hay mantenimiento de electricidad y no tenemos informe de cimientos” (Infobae, 26/9). La respuesta del gobierno frente a esto es un recorte de $60 mil millones en educación para pagarle al FMI, lo que agravará aún más la crisis social y educativa.

Pero esto no es nuevo ni son los estudiantes los únicos a los que Larreta y Acuña apuntan. Mientras se organizaban asambleas para discutir la ocupación de las instituciones, la ministra envió un mail a docentes y padres donde les trasladaba la responsabilidad por la medida y la integridad física de los estudiantes. Una extorsión para que intervengan disuadiendo a los alumnos frente a la posibilidad de que avanzaran en la toma. Así continúa esgrimiendo amenazas: “Al ser consultada sobre la posibilidad que alumnas y alumnos de otros colegios porteños se sumen a las tomas, la funcionaria dijo que ya se comunicaron con las familias para advertirles de las consecuencias de lo que podría tener la adopción de una medida similar” (La Nación, 26/9).

Este objetivo hizo agua, puesto que gran parte de familiares y autoridades educativas acompañan el reclamo, por lo que es imprescindible que la comunidad educativa, junto a quienes están luchando contra el hambre, golpeen con un solo puño para defender la educación y luchar de manera independiente contra el ajuste del gobierno y el FMI.

Abajo el massazo a la educación. No a las pasantías. Con hambre no se puede estudiar. La toma es el camino porque nadie nunca nos regaló nada.