El frente encabezado por la Unión de Juventudes por el Socialismo y el Partido Obrero (EPA), e integrado por el MST, La Corriente y estudiantes independientes, logró un aplastante triunfo en las elecciones de Centro de Estudiantes y de Consejo Directivo en la facultad de Psicología de la UBA. La Franja Morada fue literalmente barrida; se derrumbó como el conjunto de la Alianza en todo el país.

El EPA sacó 4.164 votos (30,64%) contra 2.812 (20,78%) de la Franja Morada. La diferencia de más de 1.000 votos, impensada por la mayoría antes del escrutinio, demuestra por un lado que se profundiza el giro a la izquierda que sé está desarrollando en la Universidad y en las masas, y por el otro, la disolución imparable del elenco gobernante que dominó la Universidad desde el ‘83 hasta la fecha. La Alianza, en las elecciones del año pasado, había obtenido en Psicología más del 60% de los votos y ahora sus integrantes fueron divididos, cayendo a la mitad. La Franja, con el resultado arriba señalado, y el Frepaso-Ari, que hizo una pésima votación alcanzando un pobre 12%. Aquí también se demostró el fracaso de los arribistas que creyeron salvarse escondiéndose tras el paraguas de la Carrió.

A diferencia de otros frentes que se constituyen como “cooperativas electorales”, el EPA tuvo su debut en la lucha. Durante los diferentes acontecimientos de movilizaciones y luchas, los integrantes de EPA estuvieron a la cabeza superando el boicot de la Franja Morada. A principios de año, por ejemplo, cuando la Alianza quiso despedir docentes, se impulsaron asambleas y petitorios que lograron derrotar al decano. Luego, sumando a la facultad al plan de acción piquetero, cortando las calles en la puerta (algo inédito en Psicología) y sumando a los estudiantes a cortes generales. Cuando en la UBA la lucha fue declinando, en la Facultad de Psicología continuó a través de movilizaciones internas (“ruidazos”) que alcanzaron una gran masividad.

El EPA se formó con toda esta experiencia de lucha común. Por eso todo el activismo independiente de la facultad se sumó al frente, ocupó cargos en la lista y militó en la campaña en forma muy activa. Para definir el programa y las candidaturas se debatió durante varios plenarios en los cuales se derrotó la posición independientista de no querer constituir una dirección del Centro en nombre de la horizontalidad, y de desplazar a los partidos políticos de izquierda. La constitución del EPA fue entonces una lucha política entre quienes defendimos la necesidad de una dirección independiente y de lucha del movimiento estudiantil, y los que querían disolver las organizaciones al mejor estilo de Zamora.

Por el programa y por las candidaturas delFrente, el triunfo de Psicología es la expresión más genuina del giro a la izquierda que se viene dando en la UBA. El macartismo de la Franja contra la izquierda y contra el PO no causó ningún efecto, como lo demuestran los resultados. No sólo obtuvimos el primer lugar a Centro sino que también obtuvimos la mayoría de la representación al Consejo Directivo y por muy poco no se obtuvo también la representación por la minoría.

El derrumbe de la Franja Morada ya ha adquirido un carácter generalizado e irreversible. Perdieron, además de Psicología, las facultades de Arquitectura, Económicas, Veterinaria, Ingeniería y Agronomía. En las elecciones que restan (Filosofía, Exactas y Sociales) no tienen ninguna posibilidad. Sólo ganaron Medicina, Derecho, Odontología y Farmacia, y en todas por poco margen y con una gran pérdida de votos.

El papel de la UJS y del Partido Obrero fue determinante en la formación del frente y en las luchas que se desarrollaron en la facultad. Fuimos la corriente que más se desarrolló, dando una lucha política contra la Alianza, representando al movimiento piquetero y organizando las luchas y el repudio que el movimiento estudiantil desarrolló durante todo el año. Fue por este desarrollo y el papel que jugamos que la asamblea del frente votó a favor de que el PO lo encabece.

El triunfo en Psicología marca un cambio profundo en la UBA. La izquierda revolucionaria aparece como una alternativa capaz de sustituir a la vieja dirección pequeñoburguesa, corrompida hasta la médula. La izquierda centrista, que hasta ahora había sido el canal mediante el cual se expresaron los estudiantes para echar a la Franja, tuvo un papel secundario. Llegó ahora una nueva fase del movimiento, en el cual la izquierda revolucionaria fue llamada a ocupar su papel.