Juventud

19/10/2016

Aprender 2016: la lucha contra el “operativo” aviva todos los reclamos

La toma de los estudiantes del secundario Nacional de Adrogué y del terciario ISFD n°41 contra el operativo antieducativo despertó la lucha por el conjunto de los reclamos.

UJS Provincia de Buenos Aires


En la mañana del lunes 17, casi 200 estudiantes secundarios del ex Nacional de Adrogué confluyeron en una asamblea para organizarse y enfrentar el “Operativo Aprender 2016”. Una segunda asamblea tuvo lugar más adelante y, pese a las amenazas del director (histórico candidato de la UCR del distrito), se votó masivamente la toma del colegio.


Los secundarios encontraron en los alumnos del terciario ISFD 41, con el cual comparten el edificio, una gran solidaridad y el apoyo a la medida. Los estudiantes de ambos niveles debatieron la medida y las condiciones de cursada que padecen cotidianamente en el establecimiento. En asamblea, se reafirmó continuar la toma, unificar los reclamos de máxima urgencia como refacciones integrales del colegio y la construcción inmediata del edificio propio, un reclamo histórico de los terciarios del 41.


La toma logró la no aplicación del Operativo Aprender, al tiempo que fortaleció la unidad y organización de todos los estudiantes.


 


El rol de los K


 


El “apoyo” a la toma por parte de las organizaciones kirchneristas rápidamente demostró no ser tal.


La burocracia K del gremio docente, la Lista Celeste, convocó una radio abierta el día martes; sin embargo, cuando un integrante de la agrupación Tribuna Docente  planteó allí ir al paro para quebrar la evaluación docente, que ataca sus derechos estatuarios, los miembros de la Celeste le quitaron el micrófono.


Mientras duró la toma, los integrantes de “Educar es Incluir” y “La Revuelta” (agrupaciones del FPV-PJ que dirigen actualmente los centros del ex Nacional y el 41), atacaban a los gritos a los estudiantes que la llevaban adelante.


Como esto no daba resultado, dichas agrupaciones convocaron a los dirigentes del Consejo Escolar y al Inspector Regional –ligados al PJ– para que amedrenten a los estudiantes; frente al repudio de estos, los funcionarios debieron irse con la cabeza gacha.


Con todo esto, los K lograron un rechazo creciente entre el estudiantado. Finalmente, en las asambleas del secundario y del terciario, estas agrupaciones convocaron a levantar la toma con la excusa de la “falta de legitimidad de la medida”; quedaron en minoría, y se votó la continuidad de la medida.


 


Conclusiones


 


Los estudiantes, docentes y padres que participan de las medidas de lucha están sacando conclusiones contundentes: que solo se puede enfrentar a las políticas antieducativas y de ajuste del gobierno con independencia política de las autoridades y de los gobiernos de turno, y que la lucha rinde y permite unificar los reclamos.


Las y los compañeros de la UJS-PO están jugando un rol fundamental para el desenvolvimiento de este movimiento histórico en el distrito, siendo voceros, organizadores e impulsores de las medidas, y recogiendo el apoyo del estudiantado.


Este es el camino. Continuemos con un plan de lucha por todos y cada uno de los reclamos.