Juventud

23/10/2014|1337

Elecciones universitarias: los desafíos en la Universidad Nacional de La Plata


Las elecciones estudiantiles en la Universidad Nacional de La Plata presentan una cruzada política de fondo.


El rectorado y los decanatos necesitan de centros de estudiantes maniatados, de cara a un año en el que proyectan profundizar la ya extendida política de precarización laboral, el vaciamiento de los planes de estudios y un presupuesto de ajuste.


El correlato de esta orientación, ya prevista y promovida desde la Ley de Educación Superior, es la multiplicación de los posgrados arancelados y de los convenios negreros con grandes empresas.


En este escenario, las autoridades universitarias juegan a fondo sus fichas para las elecciones estudiantiles. Franja Morada apuesta su aparato contra los centros independientes de Arquitectura y el Observatorio. El kirchnerismo se apresta a disputar las conducciones de Bellas Artes y Humanidades. Las camarillas vienen por los centros conducidos por la izquierda. La UJS ha puesto sus energías en aportar claridad sobre este escenario político, a diferencia de la mayoría de la izquierda, que aborda estas elecciones en forma autoconstructiva.


Para que la fotografía sea completa, de todos modos, es necesario hacer un balance de la conducción de la Fulp y de los centros, en primer lugar de Patria Grande (que preside la Federación y cuatro centros de estudiantes). El avance de agrupaciones oficialistas no ha tenido obstáculos en estas facultades, por la adaptación a las autoridades que se expresa en la ausencia de una delimitación y acciones concretas que impulsen medidas de lucha.


Nuestra política ha sido el llamado al conjunto de las fuerzas de izquierda a debatir este cuadro y hacer los balances necesarios, con la perspectiva de poner en pie reagrupamientos para derrotar a las listas del gobierno y del rectorado.


Las corrientes de izquierda no han recogido el guante, absteniéndose de la pelea política planteada en el movimiento estudiantil. En Bellas Artes y Humanidades, donde Patria Grande es conducción, tomó nuestro planteo de realizar plenarios abiertos de la izquierda, para defender esos centros de las agrupaciones tributarias del gobierno. En esas instancias, hicimos hincapié en la elaboración de programas políticos para convertir a esos gremios estudiantiles en organizaciones de lucha.


En Arquitectura, una numerosa asamblea votó movilizar contra las restricciones, lo cual traza un clima favorable para sostener la gran diferencia que le sacamos a la Franja el año pasado, porque evidencia la necesidad de un centro independiente para luchar por los reclamos de los estudiantes.


Entramos en la etapa de definiciones. La UJS se prepara para jugar un rol definitorio en esta lucha política y dar un salto en la conquista de representación en los centros y en los consejos directivos. Es un paso más en la preparación de un movimiento estudiantil combativo para enfrentar el ajuste y la privatización.