Ensenada: gran festival en defensa de la escuela pública
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delegado Suteba Ensenada
El sábado 29 de agosto, durante casi cinco horas, más de 350 compañeros docentes, padres, alumnos y miembros de la comunidad nos dimos cita en la alejada plaza Azucena Villaflor para ser parte del festival en defensa de la escuela pública, que organizó Suteba Ensenada.
Participaron estudiantes con sus bandas o solistas; compañeros docentes leyeron poemas y mostraron sus producciones musicales; los más chiquitos jugaban a la “búsqueda del tesoro” donde debían tratar de encontrar el destino del dinero del Fondo Educativo -que sólo en 2015 es de 10 millones de pesos.
El momento más intenso fue, sin dudas, el del homenaje a las compañeras y compañeros constructores y defensores de la escuela y la docencia: compañeras y compañeros como Silvia Rausch, Mercedes Gudano, Elsa Cambón, Anabela Giles, entre tantos y tantas. El festival les recordó cómo eran, luchadores, organizadores y defensores de la alegría y la felicidad.
El festival retrató el método con el que este nuevo Suteba, dirigido por la Multicolor, organiza la lucha por la educación y el trabajo docente. Fue parte del plan de lucha decidido en el cuerpo de delegados, junto a los paros masivos como el del No Inicio del 3 y 4 de agosto, y la movilización por infraestructura del jueves 27. La organización contó con el esfuerzo de muchos compañeros que se dedicaron a contactar a los artistas, armar las muestras de fotos, el video homenaje, preparar la plaza, etc.
Se convirtió en un golpe demoledor a las posturas que buscan la responsabilidad de la crisis educativa en los propios docentes o incluso los estudiantes. Quedó de manifiesto que la comunidad educativa, es decir todo el pueblo trabajador, defiende la escuela.
La única responsabilidad ante el colapso educativo es del gobierno. Ahora continúa el plan de lucha con una jornada de 48 horas movilizando el 8 de septiembre, a La Plata y con paro provincial al día siguiente, el 9.
Con las energías renovadas continuaremos la lucha para detener el derrumbe de la educación y por dar una salida que termine, finalmente, con la reorganización social sobre nuevas bases.