Estudiantes y docentes de la UBA salimos a la calle
El Congreso Nacional de la UJS debatirá cómo enfrentar el ajuste en la educación
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Presidente de la FUBA
La campaña de convocatoria al Congreso Nacional de la UJS se desarrolla en un contexto de alza de la lucha docente-estudiantil en la universidad. La situación no es para menos: el ministro Bullrich declaró que el boleto educativo “no es prioridad” de su gobierno, pero lo mismo ocurre con los salarios docentes y no docentes y hasta el presupuesto universitario. En estos días, la UBA ganó la portada de los principales diarios porque el rector Alberto Barbieri aseguró que los fondos no alcanzan ni para pagar la luz. La semana de paro nacional de la Conadu Histórica se acata en la UBA con cientos de clases públicas y cortes en facultades y sedes del CBC. Al cierre de esta edición, las autoridades aprobaron un presupuesto “provisorio” en el Consejo Superior, hasta agosto, con el rechazo de la Fuba y la AGD-UBA. Este presupuesto, que fue sancionado por la mayoría kirchnerista en el Congreso en octubre pasado y que ahora ejecuta el macrismo, prevé un aumento del 0% para los gastos de funcionamiento.
Docentes y estudiantes vs. ajustadores
La lucha docente-estudiantil hizo emerger la verdadera “grieta” que divide a la universidad. De un lado estudiantes y trabajadores; del otro los ajustadores del gobierno y las autoridades. El cero presupuestario viene en sintonía con el recorte salarial que Bullrich pretende imponerle a los docentes. De negociación en negociación, el ministro retiró la oferta -ya inaceptable- de un 25% en cuotas para plantear un 15% hasta octubre. Pero la respuesta de docentes y autoridades fue completamente antagónica.
Los primeros, organizados en Conadu Histórica, rechazaron la oferta del gobierno como una provocación y ya protagonizaron 10 días de paro nacional. Las autoridades, por el contrario, votaron en el Consejo Superior el presupuesto de ajuste. Barbieri y su cuestionado secretario de Hacienda, Emiliano Yacobitti, negocian con el gobierno las condiciones de su aplicación.
Las consecuencias ya se viven en la UBA: “sinceramiento” de las cuotas de la obra social -Dosuba-, paralización de las obras en las facultades, más presión por la generación de “recursos propios”. El decano de Medicina, que trabaja en tándem con el Ministerio de Educación, ya advirtió que la partida de 700 millones para el Clínicas estará condicionada al despido de centenares de contratados.
Un indicador del dramatismo que adquiere la situación es el paro convocado para este viernes 29 por la burocracia no docente de Jorge Anró, que tuvo que acordarse del salario y la “gravísima crisis” de los hospitales universitarios.
Debate en el movimiento estudiantil
La ofensiva del gobierno y las autoridades dividió aguas en el movimiento estudiantil. Los consejeros de Nuevo Espacio (UCR-Franja Morada) aprobaron el presupuesto sin chistar y dejaron en manos de Barbieri las “gestiones” para conseguir los fondos que “su” gobierno le niega a la universidad. Con ellos estuvieron los K de La UES de Sociales, que en la Junta Representativa de la Fuba se pronunciaron en contra de que la Federación se movilizara al Rectorado. Para La UES -que votó al sciolista Barbieri y formó lista con Franja en el Superior- “no hay que desviar la lucha contra Macri”. Pero La UES y La Cámpora, que co-dirigen el centro de Sociales, no convocaron a asamblea alguna en la facultad ni contra Macri ni contra nadie…
La organización de los cortes y clases públicas junto a los docentes corrió por cuenta exclusiva de la izquierda y la Fuba. Hacia el interior de la Federación, no obstante, conviven estrategias opuestas. La Mella (Patria Grande) ha proclamado que su política es la unidad con el kirchnerismo, que en la UBA está representado por los decanos de Exactas, Sociales y Filosofía y por la burocracia sindical yaskista de Feduba.
Atar al movimiento estudiantil a estos intereses es criminal. Los decanos K no luchan por un aumento presupuestario -que fue votado por sus propios diputados y senadores- sino por una mejor tajada para sus facultades en la distribución de la UBA. Una rapiña de caja entre camarillas. Por el lado de Feduba, carga con una historia de entregas de la docencia, incluyendo la reciente paritaria por 16 meses. La “articulación” con Feduba llegó a un caso extremo en Exactas, donde la presidenta del Centro de Estudiantes militante de La Mella carnereó el paro en el CBC, que era acatado masivamente por los docentes.
Todos al Congreso Nacional de la UJS
La UJS defiende el desarrollo a fondo del movimiento de lucha y por eso estuvimos al frente de la pelea por el salario docente, el boleto educativo y el presupuesto en todas las facultades y los CBC. Nuestra estrategia es el frente único de los estudiantes y trabajadores en lucha, que ya llevó a la victoria a los pibes y docentes del colegio Carlos Pellegrini. Defendemos la autonomía de la Fuba respecto de todas las variantes del régimen, que es la mayor conquista del movimiento estudiantil en la etapa precedente. La independencia política y la unidad con los trabajadores son las claves para una lucha sin ataduras de la juventud contra el ajuste de Bullrich-Macri y el Rectorado. Para desarrollar esta perspectiva llamamos a participar de los plenarios, debates y actividades que durante mayo prepararán el Congreso Nacional de la UJS.