Juventud

7/8/2013|1280

Postergan reforma educativa PRO-K en la Ciudad

Finalmente, se anunció la prórroga por un año para la aplicación de la reforma educativa que pretendía vaciar y degradar la escuela secundaria y los profesorados de la Ciudad de Buenos Aires.


Vale recordar que la reforma en cuestión se proponía eliminar más de 140 orientaciones en los colegios porteños, degradar los títulos (eliminación del perito mercantil, por ejemplo), incorporar las "prácticas profesionales obligatorias" (trabajo gratuito) en los colegios técnicos y los profesorados, recortar contenidos específicos de los profesorados (historia, matemática, etc.) y habilitar la creación de posgrados en los terciarios.


El anuncio está cargado de un evidente tinte electoral. Es que el rechazo de estudiantes y docentes hacia la reforma no ha dejado de crecer: las jornadas por la Nueva Escuela Secundaria (NES) estuvieron marcadas por cortes de calle y abrazos a las escuelas en rechazo a la reforma, se realizaron encuentros en defensa de las materias que se pretendían eliminar, asambleas en cientos de colegios y terciarios que culminaron en una movilización de más de dos mil estudiantes en las últimas semanas de clases. En este cuadro, el anuncio intenta desarticular una nueva rebelión educativa que evidentemente golpea electoralmente a ambos gobiernos.


La medida, sin embargo, tiene un carácter ambiguo. Mientras anuncian la prórroga para la modificación de los planes de estudio y títulos -otorgando validez nacional a todas las carreras y orientaciones por un año más-, macristas y kirchneristas abren las puertas a que "los colegios o institutos de formación docente que así lo deseen puedan avanzar en las reformas a modo de pruebas ‘piloto' desde 2014". Es decir, que anuncian que por abajo impulsarán la aplicación inmediata de la reforma de la mano de los supervisores y autoridades de los colegios afines.


La prórroga, sin embargo, es una incuestionable derrota política del acuerdo PRO-K para la educación. Queda planteada la lucha por la derogación definitiva de la reforma educativa reaccionaria y por las reivindicaciones de colegios y profesorados. En este cuatrimestre, la UJS se juega a fondo en la tarea de desenvolver un inmenso movimiento de lucha por los reclamos pendientes de la educación.