Juventud

1/11/2016

Rosario: represión policial en el recital de Viejas Locas


En la noche del sábado, minutos antes de comenzar el recital de Viejas Locas en el Anfiteatro de Rosario, la policía volvió a arremeter contra la juventud. Fue una fuerte represión, con balas de goma y sin razón alguna. Incluso llegaron a intentar correr a los trabajadores de los puestos de comida que estaban ubicados en la zona.


Esto se da después de la represión en la Catedral de Rosario durante la finalización de la marcha del Encuentro Nacional de Mujeres, y después de la represión que sufrieron los hinchas a la salida del clásico rosarino.


Estos hechos no sorprenden: el reforzamiento del aparato represivo combina los palazos a la juventud con la liberación de las zonas para el delito.


Este reforzamiento no acabará con la crisis de seguridad, dado que la policía es un actor fundamental en las bandas delictivas, partícipe del narcotráfico, el delito y las redes de trata. Lo que sí está provocando el plan de seguridad que apañan el gobierno nacional y el gobierno provincial es un fuerte hostigamiento de la juventud de los barrios y de los trabajadores por parte de una policía que se encuentra envalentonada.


Mientras saturan de policías las calles de Rosario, la clase capitalista opera en los grandes negociados vinculados al narcotráfico y al gran delito.  Como recientemente se destapó con la causa de megaestafa inmobiliaria y lavado de dinero del narcotráfico por parte de una banda integrada por empresarios, ex ministros y burócratas sindicales.


Basta de represión a la juventud. No queremos nuevos casos de gatillo fácil. Abajo el plan de seguridad de Lifschitz - Bullrich.


El Partido Obrero exige la separación de las cúpulas policiales implicadas en el narcotráfico y el desmantelamiento de todas las bandas delictivas que cuentan con el amparo del Estado.