Hace unos meses, alumnos de 4to año de la Escuela de Arte 501 colocaron esculturas que simulaban niños revolviendo la basura en el recientemente inaugurado Parque San Martín, en San Nicolás. La obra, que muestra una realidad cada vez más extendida como consecuencia de las brutales políticas del gobierno de Macri, fue retirada por agentes del poder nicoleño a través de la policía local. En el intento de tapar el sol con las manos, el clan Passaglia no tuvo empacho en reprimir la expresión artística de la juventud, que emerge en un escenario convulsivo. Ahora, tras idas y vueltas burocráticas, recae sobre la profesora a cargo de aquella clase una sanción institucional, suspendiéndola por dos días.

Estos hechos son, al mismo tiempo, expresión de una política general que intenta contener a la juventud en sus luchas y atacar su educación y conquistas, como lo muestra el ingreso de fuerzas represivas en distintas universidades del país o la alianza macrista-radical-peronista que fraude mediante intenta usurpar la Federación Universitaria de Buenos Aires, conquista histórica estudiantil desde el Argentinazo de 2001.

Desde la Unión de Juventudes por el Socialismo y la Agrupación Mariano Ferreyra (ISFD 127) repudiamos los ataques contra los estudiantes y denunciamos que son parte de un plan más vasto para hacer pasar el ajuste de Macri, los gobernadores y el FMI, que no tolera expresiones de rebelión y crítica. 

Llamamos a hacer asambleas en repudio a estas medidas y construir en cada casa de estudio centros de estudiantes que funcionen como herramientas estudiantiles contra los planes destructores de nuestra educación y sus manifestaciones.