En las redes sociales, el periodista Juan Leyes, de la sección política del diario La Voz del Interior compartió capturas de pantallas en las que un dirigente de PUA (Patriarcado Unido de Argentina) soltó una amenaza sibilina: “somos hombres de paz que no vamos a dejar que esto pase desapercibido, nos han faltado el respeto y nosotros ahora vamos a actuar” (sic), en alusión a una nota sobre el mencionado grupo, publicada con la firma del mencionado trabajador de prensa.

El periodista Juan Leyes contactó al grupo derechista y los entrevistó, expusieron sus planteos misóginos, oscurantistas y fascistas. También plantearon sus posturas contra la educación sexual integral en las infancias, a favor del honor, el nacionalismo y promoviendo una “protección como hombres hacia las mujeres”.

Luego de publicarse la nota, el periodista recibió amenazas de estos sujetos  sintiéndose agraviados por la entrevista y dicen textualmente: “vamos a actuar y les va a llegar una réplica”, una clara declaración intimidatoria. El grupo derechista considera que con la nota publicada habría una “terrible falta de respeto, es una chicaneada de La Voz”, y expresaron “seguro les llega la réplica nuestra que quede claro”.

El mencionado grupo de derecha cobró notoriedad recientemente en los medios por su aparición en la movilización y banderazo del 17 de agosto en la ciudad de Córdoba. En la fotografía aparece este agrupamiento con hombres vestidos con indumentaria militar con una bandera con el nombre PUA y con un soldado cubriendo a una mujer “desnuda y temerosa”.

En Córdoba estos sectores vienen actuando envalentonados por la impunidad estatal. Los sucesos de violencia hacia la bandera de la diversidad sexual y la rotura de la placa homenaje en un aniversario más del Orgullo Lgbtiq+, no fueron ni investigados por parte de la justicia.

Cabe recordar que estos sectores, en nombre de veteranos de Malvinas, hicieron bajar la bandera de la diversidad sexual en un claro acto de odio hacia nuestra comunidad, incluso ejerciendo una gran violencia, golpeando con cadenazos y golpes de puño a les activistas que se encontraban realizando una defensa pacífica de la bandera de la comunidad Lgbtiq+.

Es necesaria la más plena solidaridad con el periodista Juan Leyes frente a las amenazas de estos grupos fascistas que agreden con la total complicidad estatal. Además, las iglesias promueven mensajes de odio y la discriminación hacia las mujeres y disidencias sexuales. Y los discursos que fomenten el odio y la discriminación son legitimadores de las opresiones. Los grupos neonazis deben ser enérgicamente combatidos.