LGBTI

4/12/2018

Cómo fue la Marcha del Orgullo en Santa Fe

Más de 4 mil personas se movilizaron. La Agrupación 1969 impulsó una columna y un acto independientes de los gobiernos y el clero.

Agrupación 1969 Santa Fe Capital

El sábado 1 de diciembre se realizó la Marcha del Orgullo en la ciudad de Santa Fe. La multitudinaria concurrencia, de más de 4.000 personas, puso de relieve a un vigoroso movimiento que crece año a año contra la barbarie de las condiciones de vida, el ajuste y la persecución de los gobiernos, que afectan de manera multiplicada en la situación escalofriante del colectivo LGBT+.


La marcha recorrió centros cruciales de la salud pública y el poder político de la capital provincial. Partió del Hospital Iturraspe, donde aún ejerce como jefe de Ginecología Samuel Seiref, un lobista de la “objeción de conciencia” que se jacta de ser quien obstaculiza los abortos no punibles en el hospital -como lo hizo contra Ana María Acevedo, que terminó muriendo. Luego fue al Hospital Cullen, donde el también “objetor” Juan Pablo Poletti oficia como director, dando cuenta del aval del gobierno provincial del Frente Progresista a la injerencia clerical en el ámbito de la salud. La movilización pasó también por la Legislatura provincial -donde la semana pasada se dejó caer, al no darle tratamiento, a los proyectos de Cupo Laboral Trans y de ESI provincial– y desembocó finalmente en la Plaza de Mayo, donde se realizaron dos actos.


 



Dos actos y dos orientaciones


Desde la Agrupación 1969 intervenimos desde el principio en el espacio donde distintas organizaciones organizamos la movilización, aportando propuestas políticas al documento y al recorrido. La diferenciación se produjo cuando marcamos la necesidad de hacer una denuncia política a los sucesivos gobiernos y al Estado en tanto régimen social responsable de los trasvesticidios y transfemicidios, de la situación acuciante del colectivo LGBT+, señalando además el seguidismo de los partidos patronales al clero, que conspiraron para que el aborto siga siendo clandestino en Argentina. Este debate, franco y abierto, devino en una separación de la 1969 de la organización de la marcha.


Es por ello que impulsamos una columna independiente del Estado y los partidos capitalistas tributarios del clero, que despertó un vivo interés por sus planteos políticos que fueron acompañados de una campaña que diversos artistas comprometidos con la comunidad desplegaron con color y ritmo, vigorizando un programa político. La propuesta partió de entender que la columna independiente debía ser un revulsivo, que se delimite por el programa político y también desde lo visual.


La mesa organizadora abocó sus mayores esfuerzos en el armado de una procesión autorreferencial y complaciente con el poder, utilizando como plataforma del gobierno al colectivo de las disidencias. La cabecera de la columna oficial abrió con una bandera de arrastre que rezaba "Marcha del orgullo Santa Fe”, desaprovechando la concurrencia y el largo recorrido de 27 cuadras para darle difusión a las reivindicaciones del colectivo. De la columna oficial participó el secretario general de ATE, Jorge Hoffmann, recientemente repudiado por el movimiento de mujeres por habilitar el espacio de ese sindicato a sectores pro-fascistas para sus actividades de propaganda anti aborto legal y anti ESI, con el argumento falaz de que en la dirección del gremio “no cuestionan a quienes piensan diferente". Fueron parte de esa columna los referentes de las organizaciones que llaman a anudar los pañuelos verdes y celestes, que profesan el seguidismo al Papa.


La columna independiente que impulsó la Agrupación 1969 LGBT+ sobresalió destacando consignas centrales montadas en el inmenso cartel que coronaba la carroza-dragón. En torno a un despliegue artístico que fue armándose con el esfuerzo y la colaboración artistas visuales y músicxs del Frente de Artistas, se sumaron DJ's, que alternaban potentes mezclas sonoras con un combativo cancionero, evocando el espíritu insurreccional y festivo de la gesta de Stonewall.


La columna reunió más de 150 manifestantes, y al llegar a Plaza de Mayo realizó un acto con micrófono abierto frente a la Catedral Metropolitana, el principal templo de la arquidiócesis de Santa Fe. En el acto independiente pudieron expresarse manifestantes que acompañaron la columna o que se sumaban en la plaza, y hablaron representantes de la agrupación. Al cierre levantamos desde los parlantes de la carroza un llamado a las disidencias, a desarrollar una organización y movilización que respondan a la necesidad urgente que tiene el movimiento LGBT+ mediante los métodos de la clase obrera: organización en asambleas, movilización, plan de lucha y paro activo, hasta derrotar los planes de ajuste de los gobiernos y la ofensiva clerical. Porque sólo removiendo de raíz este régimen social podremos desarrollar verdaderamente una sexualidad libre de discriminación y opresión.