Desde el pasado 11 de marzo se desconoce el paradero de Tehuel De La Torre, un joven trans de 21 años, oriundo de San Vicente, que vive actualmente en Alejandro Korn (zona sur del Gran Buenos Aires). Él había salido hacia una entrevista laboral y no regresó. Al día de la fecha, Luis Alberto Ramos, de 37 años, con quien el joven se encontró para la entrevista, es el único sospechoso de la desaparición.

Ramos cuenta con denuncias previas por violencia y una condena por homicidio simple. Según su testimonio, él y Tehuel se encontraron a las 16.30 del 11 de marzo, y luego cada uno se fue por su lado. El celular del joven fue activado por la zona del barrio Esperanza, donde vive el implicado.

Es preciso señalar que la policía Bonaerense, al mando de Sergio Berni, dejó pasar más de una semana del hecho para accionar en su búsqueda, sabiendo que las primeras horas son centrales para hallar con el paradero de personas desaparecidas. La trascendencia pública del caso es fruto de que vecinxs y amigxs se organizaron para reclamar la aparición de Tehuel.

El trasfondo de su desaparición es que el joven se encontraba en una situación de vulnerabilidad económica y le surgió la posibilidad de acceder a un trabajo a través de una propuesta de un amigo lejano; era la primera vez que lo convocaban para trabajar. Sucede que en la Provincia de Buenos Aires, al igual que en todo el país, la comunidad travesti-trans, se encuentra excluida de la posibilidad de acceder a un trabajo formal y registrado, a pesar de que se encuentre vigente el Cupo Laboral Trans desde 2015.

La situación es tal que solamente 1 de cada 10 personas trans acceden a un puesto laboral. Como consecuencia de la discriminación y la vulneración de derechos, la esperanza de vida en el colectivo travesti trans no binarie es de 35 años en promedio. Además, el ajuste impuesto por el Fondo Monetario Internacional agudiza cada vez más las condiciones de vida de lxs trabajadorxs, golpeando así a los sectores más desprotegidos.

Algunos medios de comunicación -como Clarín, El Día y El diario de Cuyo- que se hicieron eco de la desaparición, realizaron un tratamiento sensacionalista del caso, no respetando la identidad de género de la persona desaparecida. Esto evidencia que la propia ley de Identidad de Género, la cual en su texto impide estas prácticas, es solo papel mojado debido a la inacción del Estado y los gobiernos, que no aseguran su cumplimiento.

Desde la Agrupación LGBTI+ 1969 exigimos la aparición con vida de Tehuel, y responsabilizamos a Sergio Berni y al gobierno de Kicillof por la desprotección que viven las personas travestis-trans, dando lugar a los travesticidios y transfemicidios. A su vez, denunciamos a la prensa burguesa del tratamiento que dan del desarrollo de la noticia, no respetando la identidad autopercibida del jóven.