LGBTI

8/7/2021

Córdoba: el Ministerio de Salud baja una publicidad de autotesteo de VIH por el rechazo público

Violencia de Estado contra las identidades sexuales y de género.

Este martes 6 el Ministerio de Salud de Córdoba emitió una publicidad en la que se anunciaba el programa de Autotesteo de VIH. Allí se detallaba a qué público iba dirigido, de qué manera se realizaba y en dónde se lo podía adquirir. El contenido altamente discriminatorio mereció que la publicación fuera eliminada al siguiente día por el rechazo público que recibió.

En dicho video se especificaba que debía tratarse de “varones que tienen sexo con otros varones; trabajadoras y trabajadores sexuales, y personas trans”. Allí se expresa toda una orientación heterocispatriarcal, que revela un claro posicionamiento del Estado y, particularmente, del gobierno pejotista, cuya base es la estigmatización y la patologización de las identidades sexuales y de género. De esta manera se instala la idea de que el VIH se propaga solo en personas de la comunidad LGBTI+. Por eso, sacar el video de circulación no ha borrado el problema de fondo: la orientación que tiene el gobierno de Juna Schiaretti hacia la comunidad.

Asimismo, la cuestión epidemiológica del VIH no se resuelve con un autotest, si éste se promueve de manera estigmatizante sobre un sector de la población, mientras las personas heterosexuales escasamente se testean. Además, no hay campañas reales de prevención y difusión, lo que se traduce en la escasez de profilácticos en los centros de salud públicos, así como la falta de información sobre las enfermedades de transmisión sexual. Del mismo modo, la falta de ESI en la educación es un obstáculo para el acceso a la información objetiva, algo demostrado en la vara con la que los organismos de salud se manejan.

En el video se hablaba además de “trabajadoras y trabajadores sexuales”, normalizando que la prostitución es un trabajo como cualquier otro, negando el abuso, la explotación sexual y las redes de trata de personas asociados a ella. Se recurre al uso del concepto de “trabajador” para normalizar la violencia heterocispatriarcal y de Estado que soporta quien ejerce la prostitución.

Denunciamos este posicionamiento en estrecha unión con las Iglesias, instituciones que promovieron el concepto de la “peste rosa” asociado al VIH/SIDA como forma de aleccionar a las disidencias. Cabe mencionar que esta definición también la escuchamos en voz del gobierno de Cambiemos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Si el interés del Estado provincial fuera realmente la prevención y detección de VIH, la convocatoria sería a toda la población, sin basarse en datos estadísticos dudosos y estigmatizantes. Además, resolvería la situación de vulnerabilidad y violencia en la que viven quienes están siendo prostituides. Quienes han gobernado en las últimas décadas lejos están de fomentar leyes que otorguen la jubilación anticipada por envejecimiento prematuro para persones que conviven con el VIH, así como el tratamiento con antirretrovirales en forma continua y la liberación de las patentes para el desarrollo de vacunas y producción de medicamentos.

Por eso, continúa la lucha por la aprobación del proyecto de ley nacional de respuesta integral al VIH, las hepatitis virales, la tuberculosis e infecciones de transmisión sexual, apoyado por personas que conviven con el VIH, activistas y el Frente de Izquierda en el Congreso.