El secretario de Gobierno y ciudadanía, Dr. Eduardo López, envió una carta dirigida a los responsables de los partidos políticos, exponiendo las normativas nacionales y provinciales vigentes, además de la ordenanza municipal, para las campañas electorales y haciendo hincapié en las sanciones correspondientes en caso de no cumplir con éstas.

Desde el Partido Obrero de Rafaela denunciamos esta modalidad de censura por parte del gobierno justicialista local que utiliza el aparato estatal para extorsionar la militancia que llevamos adelante mediante volanteadas, mesas en diferentes puntos de la ciudad, “piqueteadas” de prensa y otras actividades. 

Estas formas de amedrentamiento y persecución que tiene el pejotismo kirchnerista, no son nuevas. Ya en el año 2017, Delvis Bodoira, el anterior secretario de Gobierno Municipal y niño mimado del intendente Luis Castellano, llamó a un compañero que se postulaba como candidato, presionándolo para que se cancele y levante una actividad militante que se estaba llevando a cabo, como todas las semanas, en el centro de la ciudad.

Cabe destacar que la militancia revolucionaria no toma descanso durante ningún momento del año y las actividades para la creación de conciencia en los y las trabajadoras son permanentes y no sólo durante las campañas electorales.

Esta avanzada antiobrera es parte de la política que despliega el gobierno municipal frente a la organización y movilización de compañeros y compañeras que luchan por un gobierno de trabajadores, denunciando a las burocracias sindicales, los pactos del régimen y la complicidad del pejota en el ajuste de Macri.

Cabe destacar en este punto que el candidato a gobernador de Santa Fe por este espacio, Omar Perotti (ex intendente de Rafaela), fue uno de los artífices de la privatización del Banco de Santa Fe, en 1996, cuando ocupaba el cargo de ministro de Producción durante el gobierno de Jorge Obeid. Más cercano en el tiempo,  a meses de la asunción de Macri como presidente, votó positivamente como senador el pago a los fondos buitres por casi U$S 10.000 millones, aprobó también los pliegos de Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti para integrar la Corte Suprema de Justicia de la Nación, quienes impulsaron luego el repudiado fallo del 2×1 que pretendía la disminución de las penas a genocidas de la dictadura. Finalmente, en el 2018 y en un claro guiño a la Iglesia católica, siguiendo la línea de “en nuestro espacio hay pañuelos verdes y celestes” o “no se enojen con la iglesia” (Cristina Kirchner dixit), se abstuvo en la votación de la ley de Interrupción Legal del Embarazo.

¡Abajo la persecución a los y las compañeras!