En la madrugada del 18 de julio de 1974 fue asesinado Ángel Vázquez a los 34 años de edad, primer secretario general de STIA Firmat. Al cumplirse 45 años de su muerte, nos parece necesario recordar y reivindicar su lucha que mantiene plena vigencia.

El Negrito fue atropellado por un vehículo, en un accidente nunca esclarecido, pero distintas versiones apuntan a un asesinato político. El hecho tuvo correlato con otro “accidente de tránsito” donde falleció la enfermera Luisa Eva de Gómez, que junto a Vázquez participaron en la toma del Hospital de la ciudad de Firmat y encabezó una serie de reclamos a la provincia.

Este tipo de hechos sucedieron en la Argentina de los `70  bajo el accionar de  la Triple A, organización conformada bajo el gobierno de Perón, de Isabel y López Rega, que bajo los métodos  del  terror, buscaban aniquilar el ascenso obrero que había comenzado con el Cordobazo y que se extendió al conjunto de nuestro  país descabezando las direcciones combativas y clasistas por la vía de la aniquilación física. Este periodo estará marcado  por el asesinato de activistas gremiales combativos y clasistas, del movimiento estudiantil y de las organizaciones políticas de izquierda y de lucha.  

Durante esta época se ilegalizarán también organizaciones políticas y gremiales con el objetivo de hacer pasar un feroz ataque a las condiciones de vida de los trabajadores. Las tareas emprendidas por la AAA, serán culminadas por la acción de la dictadura genocida que terminará con la desaparición de 30.000 compañeros, en su mayoría delegados y activistas de la clase obrera. Una época de represión y tortura que implicó un retroceso  en las conquistas y condiciones de vida del pueblo trabajador.

El “Negrito”

El "Negrito" Vázquez formó parte de esa camada de trabajadores que luchó por transformar la realidad en función de los intereses de la clase trabajadora.  En 1973 participó de la toma del hospital general San Martin de Firmat, junto a los empleados del nosocomio y otros dirigentes gremiales de ramas varias. Mediante la lucha se logró obtener para los afiliados de STIA  la conquista del pago del 100% por horas extras y en días feriados el pago del 300% por hora.

Impulsó también la compra de un local para el sindicato, así como también el reclamo de un sanatorio para los afiliados y la creación de una farmacia social. Junto a  la comisión interna de Cotar se unificó una  lucha por un mejor salario para los trabajadores. Su vida estuvo regida por una gran solidaridad de clase sin importar  a qué rama gremial pertenecieran los trabajadores.

Para los trabajadores de STIA nuestro mejor homenaje al Negrito es continuar con la lucha que emprendieron él y tantos otros compañeros. La lucha por la defensa de los puestos de trabajo, por terminar con los salarios de miseria o por mejorar las condiciones de trabajo se encuentra más vigente que nunca.  Basta sólo con mirar las últimas paritarias firmadas por la patronal y la dirección del gremio, o la situación que atraviesan trabajadores de otras empresas como los compañeros de Vasalli, para dar cuenta de esto.

Los trabajadores estamos asistiendo hoy a una bancarrota del país y con él de nuestras condiciones de vida. El ajuste del FMI y sus planes de reforma laboral y previsional  sólo servirán para descargar aún más la crisis sobre las espaldas de los trabajadores, de ninguna manera para superarla.

Por eso planteamos la necesidad de emprender un plan de lucha para derrotar el ajuste de Macri, el FMI y sus socios del PJ. Por eso planteamos la necesidad de un Congreso de base de la CGT, las CTA´s y todos los sindicatos, para que a partir de la deliberación los trabajadores planteemos un programa de lucha y una salida en favor de los trabajadores.

Brindamos nuestro homenaje al Negrito Ángel Vásquez y llevamos adelante su mejor enseñanza: la de organizarse y luchar para defender las conquistas de los trabajadores.

¡Negrito presente!

 

¡Hoy y siempre!