Vivienda

Bestial desalojo en el barrio 22 de Enero de La Matanza

La Bonaerense de Kicillof incendió merenderos y desplazó a doce familias.

En la madrugada del 24 de diciembre la policía Bonaerense ejecutó un nuevo desalojo de familias asentadas en el barrio 22 de Enero de Ciudad Evita, La Matanza. En las vísperas de Nochebuena, el gobierno de Axel Kicillof y Sergio Berni y la intendencia de Fernando Espinoza perpetraron un violento operativo represivo que incluyó la quema de tres merenderos y casillas familiares.

A las 6:00 de la mañana los vecinos del asentamiento despertaron con el violento desalojo, que según denuncian ni siquiera contaba con orden judicial. Doce familias fueron así desplazadas de los terrenos baldíos en que se encontraban radicados con viviendas precarias.

El barrio 22 de Enero ya había sido epicentro de un brutal operativo represivo que implicó el desalojo de 300 familias el 1 de noviembre, ocasión en la que por la noche y bajo la lluvia, sin que mediara comunicación del fiscal interviniente ni orden judicial, también fueron incendiados merenderos e incluso la policía arrojó gases lacrimógenos al interior de una iglesia donde se había refugiado un centenar de personas.

La represión es la única respuesta que el gobierno provincial ofrece a las familias sin techo, cuando se estima un déficit habitacional de dos millones de viviendas. Ello porque se profundiza la política de ajuste, como la expresada en el Presupuesto 2022 con planes de obra irrisorios -que por lo demás son año a año subejecutados. Efectivamente, la única partida beneficiada en medio de los recortes del gasto público es precisamente la destinada a la maldita Bonaerense, a la que recurren para arremeter contra la lucha popular. Lo que hace más de un año sucedía en Guernica es una política de Estado.