Durante la semana avanzó el escandaloso descabezamiento policial en la comisaría de la localidad cordobesa de La Falda. Ya son 6 los policías detenidos tras la muerte de Jonatan Romo, quien fue reducido el pasado domingo 10, en la vía pública, luego de que padeciera un brote psicótico. Durante la violenta detención no se respetaron los protocolos y finalmente el hombre pereció en la comisaría. La autopsia indicó muerte por asfixia mecánica.

¿Qué pasó con Jonatan Romo?

Jonatan Romo tenía 35 años y murió por asfixia mecánica dentro de una comisaría donde no le correspondía estar. Romo tenía trastornos psiquiátricos y era adicto. Según informaron sus allegados, en diciembre ya había sido golpeado por policías en un procedimiento durante una crisis que había tenido en La Falda.

El hombre que, según los protocolos, debía ser trasladado a un centro médico, fue llevado violentamente a la delegación policial, donde terminó muerto. La autopsia reveló sufrió asfixia mecánica causada por terceros.

El fiscal Raúl Ramírez confirmó que hubo una “muerte violenta” y por el hecho ordenó el jueves las detenciones de seis policías de la mencionada localidad. Cuatro de ellos quedaron presos e imputados por supuesto homicidio calificado por su condición de uniformados: el sargento Miguel Ángel Aguilera, el cabo Juan Pablo Zunino, el cabo Hernán Suárez y el sargento Walter Geri. En tanto los restantes dos están presos por encubrimiento agravado: el subcomisario Pablo Antonio Zárate y el agente Lucas Giménez.

Institución descompuesta

No es la primera vez que la policía de Punilla está en el centro de la escena, hace tiempo que viene siendo fuertemente cuestionada en casos que han tomado estado público por la gravedad de los hechos. Por esta razón, el repudio no tardó en expresarse, desde el Movimiento Plurinacional disidente y feminista de Capilla del Monte, indicaron: “Nos cuesta pensar en “transparencia y esclarecimiento” después de haber presenciado la falta de investigación en los casos de Jorge Reyna (causa archivada), Mariela Natalí y Cecilia Basaldúa”. También pusieron de relieve que se trata de “toda una región que depende de la Fiscalía de Cosquín y de uno de los auxiliares de la Justicia: la policía de Córdoba”.

Por su parte, Soledad Laciar, madre de Valentino Blas Correas, el joven asesinado por policías en 2020, también se expresó en los medios: “Hace dos años que digo que esto va a volver a pasar si no hay cambios estructurales, pero los remueven (a los policías) y los ponen en otro lugar con otro cargo”, en ese sentido apuntó contra el gobierno, al señalar: “Lo que sí veo es que no se hacen cargo. La Policía es del Gobierno (provincial). Se tienen que hacer cargo”.

En tanto el gobernador, Juan Schiaretti, afirmó que “se investigará hasta las últimas consecuencias”. No obstante, se trata de declaraciones de ocasión, con las que pretende evadir la responsabilidad que le cabe al poder político. Se trata de otro crimen de Estado, que la policía quiso hacer pasar como “deceso por infarto”.

Juicio y castigo a todos los culpables materiales y políticos. Desmantelamiento del aparato represivo.

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