El próximo 10 de octubre comenzará en la ciudad de Tucumán el juicio a César Milani y Esteban Sanguinetti, por la responsabilidad de ambos en la desaparición en 1976 de Alberto Agapito Ledo, oriundo de La Rioja y estudiante de historia en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán.

Se trata del segundo juicio por delitos de lesa humanidad contra el ex Jefe del Ejército bajo el gobierno de CFK.

La desaparición de Ledo

Ledo  ingresó como conscripto en febrero de 1976 al Batallón de Ingenieros de Construcciones N°141 de La Rioja, al que pertenecía César Milani con el grado de Subteniente. El 20 de Mayo de ese año, una fracción del mismo fue asignada a la zona de Operaciones Tucumán, en la ciudad de Monteros. Un mes después, el 17 de junio, el joven fue sacado del campamento en la madrugada por  Capitán Sanguinetti y nunca regresó.

Posteriormente, se les informó a los otros conscriptos que Ledo había escapado del campamento. El 22 de junio, el Capitán Sanguinetti dispuso la deserción del soldado, designándose como oficial instructor al Subteniente César Milani y al Sargento Ayudante Roberto Lotero (quien se encuentra fallecido). Se dio por demostrada la deserción de Ledo y se ordenó su captura.

La madre del conscripto, Marcela Brizuela de Ledo, presentó un habeas corpus el 1° de febrero de 1977 en el Juzgado Federal de La Rioja, y luego denunció su desaparición ante la Conadep (legajo N° 2987). También lo hizo ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el Organismo Madres de Plaza de Mayo y el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos.

La causa y las causas

El juicio que comienza este viernes cuenta con Graciela Ledo, hermana del desaparecido, como querellante.

Mientras que Sanguinetti está imputado por ser el autor del secuestro y crimen del soldado, sobre Milani pesa la acusación de “encubrimiento en concurso ideal con falsedad ideológica”, por haber estaba implicado directamente en la desaparición firmando un acta apócrifa por deserción.

El primer juicio contra Milani concluyó hace un mes con un vergonzoso fallo de impunidad dictado por el Tribunal Oral Federal de La Rioja, que absolvió a Milani y a otros cinco imputados y los dejó en libertad, reforzando así la impunidad para los genocidas. En este sentido, organismos de derechos humanos nucleados en el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia presentaron al Consejo de la Magistratura de la Nación el pedido de destitución de los jueces federales Jaime Díaz Gavier y Julián Falcucci por “mal desempeño en el ejercicio de sus funciones” en el juicio realizado en agosto en La Rioja.

Por otro lado, resta que sea investigado también por su participación en el Operativo Independencia, donde actuó bajo las órdenes de Antonio Domingo Bussi. En aquella operación, iniciada en febrero del ’75 bajo el gobierno de María Estela Martínez de Perón , más de 5 mil militares ocuparon la provincia y secuestraron, torturaron y asesinaron a miles de militantes populares, obreros, estudiantiles y campesinos.

Juicio y castigo

Que Milani haya llegado al banquillo de los acusados, tras cuatro décadas de impunidad, es producto de la incansable lucha de los sobrevivientes, familiares y organismos de derechos humanos independientes del Estado, y particularmente de la familia de Ledo, que nunca dejaron de denunciar a los responsables de la desaparición de Alberto.

La pelea para que sea castigado por sus crímenes se inscribe en la lucha por el fin de la impunidad para todos los genocidas, y contra el operativo de reinstalación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad interior, que tuvo un momento clave justamente con la designación de Milani bajo el gobierno kirchnerista y se ha reforzado a lo largo de la gestión macrista.

Más que nunca, juicio y castigo a todos los genocidas. Cárcel común y efectiva. Son 30.000. Fue genocidio. Apertura de los archivos.