En estos días se está discutiendo en el Senado de la Nación si corresponde el ascenso al grado superior del Teniente Coronel Carlos Villanueva, acusado de crímenes y torturas en los años 70 y de haber hecho asesinar a Jorge Cafrune en una típica “operación encubierta” (lo atropellaron en una ruta).

Denunciamos que el gobierno menemista ha comenzado a utilizar las mismas técnicas criminales contra los opositores políticos.

El lunes 16 de junio pasado intentaron asesinar a nuestro dirigente nacional Claudio Rubén Comari, atropellándolo con un auto en la avenida Montes de Oca de esta Capital.

Fue ésta sólo la última de una serie de “acciones encubiertas” contra nuestro partido, que han ido acompañando la campaña macartista permanentemente desplegada hacia nosotros directamente por Menem y su ministro Corach. Reseñamos las anteriores:

1) En el mes de diciembre pasado fue atropellado, cuando se conducía en su moto, por un automóvil, nuestro secretario general de la provincia del Chaco, resultando con lesiones múltiples, entre ellas, la quebradura de un brazo.

2) En el mes de abril pasado es atropellado por un automóvil, mientras cruzaba la calle, un dirigente de nuestro partido de la provincia de Córdoba y del orden nacional; también sufrió lesiones múltiples.

3) En el mes de mayo pasado, nuestro secretario general de la provincia de Neuquén fue objeto de sabotaje en su automóvil —en dos oportunidades— en el sistema de frenos.

4) A principios de junio, a un dirigente de nuestro partido de la Capital Federal, que aparece como tal en el dossier referido a nuestra organización en poder del Juzgado del Dr. Liporace, le sacaron una tuerca de la rueda de su moto con el visible objetivo de producirle un accidente. Dos meses atrás había sucedido exactamente lo mismo (la misma tuerca) en la moto de un dirigente de la agrupación Venceremos, también de esta Capital.

Como decimos más arriba, ahora a todas estas “acciones”, se le suma la realizada contra Claudio Comari; por sus características —la violencia con que lo impactaron— estuvo inequívocamente dirigida a matarlo. Comari aparece identificado como dirigente de Patria Libre en el dossier del Dr. Liporace y en los videos que tiene dicho juzgado.

A todas estas acciones se les suman otras más “tradicionales” como infinidad de amenazas telefónicas, seguimientos, “aprietes” de personal civil o uniformado, y también el tiroteo del domicilio de nuestro dirigente de la provincia de Tucumán y del orden nacional, Federico Masso, y del dirigente y vocero de la Venceremos de la Capital, Sebastián González. A este último compañero, que fue entrevistado por Nuevediario cuando los incidentes en Plaza de Mayo de la reciente marcha educativa, cuatro individuos, que se conducían en un automóvil Volkswagen Polo color rojo, le tirotearon la oficina donde trabaja, el lunes 16 de junio pasado.

Denunciamos entonces —una vez más— la acción criminal por donde se va orientando el gobierno, que si no es contenida por la presión de todos los sectores democráticos de la sociedad, va a terminar con el asesinato de alguno de nuestros dirigentes o militantes.

Somos también absolutamente solidarios con todos los agredidos por esta campaña de amedrentamiento, entre ellos con el periodista Fernández Llorente.

Para comunicarse, llamar a los teléfonos 641-4550 y 302-4632