Condenan a los asesinos de Diego Gallardo

Cuatro ex policías bonaerenses fueron condenados a prisión perpetua tras ser hallados culpables del crimen del joven Diego Gallardo. Diego murió tras haber sido brutalmente golpeado en la Comisaría 3ª de Avellaneda, en enero de 2005.


El 10 de enero de 2005, Diego Gallardo estaba preso en Dock Sud. Según se dijo, los policías descubrieron un túnel por el cual los presos buscaban escapar.


Los ocho presos del calabozo fueron brutalmente golpeados con palos y reubicados en otras comisarías (con un informe médico falso, que dejaba constancia de que todos estaban bien).


Al día siguiente, Gallardo comenzó a sentirse mal en su nuevo lugar de alojamiento (la Comisaría 1ª de Avellaneda) y murió más tarde en el Fiorito.


Además, se imputó a los ex policías de "severidades reiteradas" por los golpes a los otros siete compañeros de celda de Gallardo.


La tortura y la muerte de jóvenes de nuestras barriadas en las comisarías o por casos de gatillo fácil son cotidianas.


La Justicia se tomó más de dos años para condenar a los asesinos.


Mientras tanto, la vieja Bonaerense, y la "nueva Policía" de Arslanián, siguieron cobrándose vidas.


Para terminar con estos crímenes, es necesario el desmantelamiento del aparato represivo.