El viernes 2/12 el Tribunal Oral Federal a cargo de los jueces Federico Díaz (presidente) Alejandra Cataldi y Abelardo Basbus dio a conocer las condenas en la megacausa por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar en Jujuy.

Los delitos que el tribunal consideró para la pena fueron homicidios, violaciones sexuales, privación de la libertad y tormentos. Estos delitos se acreditan contra 120 víctimas, entre las cuales se encuentran referentes emblemáticos como la docente Marina Vilte, Luis Aredez y el dirigente sindical de la Mina El Aguilar, Avelino Bazán.

A pesar de los cinco años de juicio donde brindaron testimonio más de 490 testigos, las condenas en su mayoría son menores. De los veintiún acusados solo a cuatro se les dictó perpetua (Juan Carlos Jones Tamayo, Juan Carlos Lucero, José Américo Lescano y Ceferino Narváez). El resto de las penas son menores a veinticinco años y hubo un absuelto por el “beneficio de la duda”.

Todavía no se conocen los fundamentos del fallo quedando pendiente para marzo del 2023.

La lucha contra la impunidad

Los genocidas increíblemente siguen contando con privilegios a la hora de afrontar el proceso judicial. Ninguno estuvo en la lectura del fallo y la mayoría cuenta con el beneficio de la prisión domiciliaria.

En el banquillo de los acusados no estuvo Carlos Pedro Blaquier, a pesar de que en la megacausa varias veces se menciona el uso de las camionetas de su empresa en la noche del apagón.

Blaquier y su familia continúan beneficiados por la impunidad clásica de los dueños de todo. Recordemos que la Justicia jujeña lo separó del juicio por una supuesta “insania” para afrontar el juicio y hasta la Cámara de Casación declaró irregular el fallo y cuestionó los estudios médicos realizados. Pero no es solo la Justicia de Morales. Blaquier cuenta con el apoyo del gobierno nacional, a tal punto que la secretaría de DD.HH. de Nación, a cargo del camporista Pietragalla que actúa como querellante en la causa del “apagón”, avaló la “incapacidad mental” de Blaquier.

Este fallo es un paso adelante del movimiento de derechos humanos logrando cuatro prisiones perpetuas y que por primera vez se incorpore los delitos sexuales. Sin embargo queda mucho por luchar para que haya una verdadera justicia por todos los crímenes de la ultima dictadura militar, civil y eclesiástica. Queremos perpetua y cárcel común para todos los genocidas.

Los trabajadores que enfrentamos el ajuste de los gobiernos del PJ y radicales, partidos cómplices de la dictadura, tenemos que ir a fondo en que se juzgue a la clase capitalista organizadora del golpe como Blaquier y todos los empresarios que fogonearon la dictadura para aplastar a lo mejor de la clase obrera.

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