Córdoba: 10° Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil, “vamos a seguir hasta que consigamos un verdadero Nunca Más”

Lxs pibes de las barriadas populares “nos necesitan, están en una total desidia por parte del Estado en los barrios más vulnerables”, se afirmó en un documento.

10 Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil en Córdoba.

El pasado martes 27 de agosto se desarrolló la décima marcha contra el gatillo fácil en varias provincias del país. En Córdoba, la convocatoria fue impulsada por Familiares Víctimas de Gatillo Fácil, organizaciones sociales, políticas y piqueteras. La marcha comenzó pasadas las 17 horas desde Colón y General Paz y se dirigió a Casa de Gobierno; en su recorrido denunció la impunidad del aparato represivo y se pidió justicia por todxs las víctimas del accionar represivo.

En la marcha se denunció que en los 8 meses de gestión de Martin Llaryora: “hubo 17 asesinatos, 11 fueron casos de gatillo fácil y las otras 6 fueron muertes en contexto de encierro, esto demuestra que los gobiernos pasan y la represión queda”. Así las cosas, la marcha año a año sigue expresando la profunda descomposición del aparato represivo del Estado. La policía, la justicia y el servicio penitenciario siguen involucrados en hechos aberrantes como torturas y asesinatos.

En ese sentido, el documento de la movilización en Córdoba planteó: “no son errores, no son excesos, tiran a matar, además, les inhabilitan por unos pocos años y después pueden volver a ser policías (…) como cada año denunciamos la criminalización de la protesta. Nos quieren con miedo, nos amedrentan para que retrocedamos y abandonemos la lucha. Pero lo peor ya nos lo hicieron, mataron a nuestrxs hijxs. Vamos a seguir hasta que consigamos un verdadero Nunca Más, por lxs pibes que nos quitaron y por lxs que nos quedan”. Estremecedor.

Además, el documento de la marcha sobre lxs pibes de las barriadas populares afirmó: “elles nos necesitan, están en una total decidía por parte del Estado en los barrios más vulnerables. Son las organizaciones y la militancia las que sigue haciendo esfuerzo para que tengan espacios de contención, mientras el gobierno pretende encerrarles desde los 13 años. Estamos totalmente en contra de la baja de punibilidad en un contexto de crisis, el gobierno que no se digna a repartir alimentos a los comedores invierten en más balas y más policías”.

“Les decimos a las familias nuevas que lamentablemente se están sumando a esta lucha que les abrazamos con toda la fuerza de esta marcha, porque es sumamente importante articular, conocernos, porque la salida es colectiva”, afirmó el documento conmovedor.

Un aparato descompuesto, una política criminal

En el Servicio Penitenciario, el caso Bouvier destapó una trama de corrupción en su interior que es parte de un cuadro de crisis que recorre a toda la institución; un cuadro que perdura en el interior del servicio penitenciario.

La represión, el gatillo fácil y las víctimas de las balas policiales son expresiones brutales de un aparato policial descompuesto. La Justicia, por su parte, hace oídos sordos y garantiza la impunidad de los uniformados y del gobierno, al que le cabe una clara responsabilidad en estos hechos.

Sin embargo, los gobiernos y la oposición patronal apuntan a reforzar aún más el aparato represivo mientras desarrollan una política persecutoria contra el movimiento obrero y piquetero. El propio Llaryora se ha manifestado a favor de la intervención militar en la seguridad interior.

Tanto el gobierno nacional como el provincial tienen una orientación común contra la vigencia de las libertades democráticas, particularmente contra el derecho a la protesta. Quieren regimentar a la clase obrera. Por eso en Córdoba hay procesados por protestar y persiguen a quienes luchan contra el hambre y organizan comedores populares. Mientras miles de pibes se van a dormir sin comer, quieren bajar la edad de imputabilidad.

Defender el derecho a luchar para defender todos los derechos

Es necesario defender el derecho a la protesta para luchar por todos los reclamos obreros y populares y para hacer efectiva la consigna “Gatillo fácil nunca más” como parte de una transformación social en función de los intereses de la clase obrera.

Es clave reagrupar fuerzas en la perspectiva de la huelga general para derrotar la política represiva de Milei y los gobernadores. La lucha contra la represión, el ajuste y la impunidad es la misma, es una sola lucha para derrotar al gobierno que las genera.

Levantemos las banderas del desmantelamiento del aparato represivo del Estado, de la elección y revocación popular de jueces y fiscales, en la perspectiva de pelear por una sociedad sobre nuevas bases. Gatillo fácil nunca más. Basta de persecución a los luchadores. No a la baja de la edad de punibilidad.

Al final de la movilización, la policía provocó a lxs manifestantes, es decir a las propias familias víctimas de la represión policial. Lo que completa una política nefasta de encubrimiento, disciplinamiento e impunidad. No podrán, con la movilización popular podemos derrotarlos. La 10 marcha nacional contra el gatillo fácil fue un paso adelante en ese sentido. Venceremos.

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